Eduardo Namoncura
En un encuentro no apto para cardiacos, Malleco Unido se impuso por 2-1 ante Iberia, en partido válido por la decimonovena fecha del Campeonato de Segunda División y que se jugó en el Estadio Alberto Larraguibel de Angol ante más de 2.000 espectadores.
Los dirigidos por Juan José Ribera se quedaron con el clásico y de paso le aguaron la fiesta al cuadro de Los Ángeles, que de haber ganado el partido hubiese alcanzado la punta del campeonato, tras la caída del líder Puerto Montt ante Trasandino.
La victoria marcó el reencuentro del equipo con la afición, que pese a las últimas cuatro derrotas consecutivas, dos de ellas de local, de igual forma se dio el tiempo de asistir al estadio y apoyar con todo al León de Nahuelbuta
El encuentro comenzó con Iberia imponiendo sus términos y dominando las acciones. Eso le llevó a abrir la cuenta a los 24' a través de Eduardo Navea.
El local corrió para emparejar la cuenta y tuvo premio a los 35' cuando Julio Inaí capturó un pase largo y decretó el 1-1.
La segunda mitad fue más trabada, con ambos equipos tratando de dominar el balón, pero fallando en los pases. Sin embargo en el minuto 80, cuando Iberia estaba más cerca del gol, el volante Raúl "Cachulo" Robles, marcó un golazo de tiro libre dándole la victoria definitiva a la escuadra local.
El gol le permitió a los angolinos dejar atrás una racha negativa de cuatro derrotas.
"El partido de hoy (ayer) fue un partido perfecto, donde no le dimos los espacios a Iberia. En el segundo tiempo supimos mantener a nuestro rival a raya y además aprovechamos las oportunidades para anotar", expresó el técnico de Malleco, Juan José Ribera.
Julio Inaí, autor del empate, también habló. "El partido fue muy duro pero el equipo supo salir adelante, sobreponerse a ir abajo en el marcador y en definitiva ganar este clásico".
"Siempre es lindo marcar un gol y sobre todo en un clásico", complementó Raúl Robles, el volante que se convirtió en el héroe de la jornada al anotar el gol del triunfo.
El clásico se disputó intensamente en la cancha y en las tribunas. Prueba de ello es que en el minuto 15 del primer tiempo hubo disturbios protagonizados por ambas barras y que obligaron al árbitro Marcelo Sáez a suspender el encuentro por alrededor de cinco minutos.
Tras la incidencia, el juego se reanudó gracias a la intervención del personal del Gope de Carabineros.
De acuerdo a lo informado por personal policial no hubo detenidos, pero sí tres heridos leves.