Hugo Soto
Ni siquiera las crudas imágenes de los peritos de la Brigada de Homicidios de Investigaciones y del Servicio Médico Legal, mostrando los cuerpos ensangrentados de las víctimas del "Chacal de Carahue", causaron tanta conmoción como la descripción de los hechos relatados por Juan Desiderio Rodríguez Llancapán durante la primera jornada del juicio en su contra por los delitos de homicidio, femicidio y parricidio.
La extensa jornada se realizó ayer en la Sala de Audiencias del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco, donde el imputado narró los detalles de la sangrienta madrugada del 25 de mayo del año pasado. Previo a ello, Rodríguez contó que junto a su conviviente Norma Bañares habían conocido en la cárcel a la otra víctima adulta, Julio Huitrañán, y que tras su salida de la cárcel éste comenzó a realizar visitas a la casa donde ocurrieron los hechos. La dramática sucesión de hechos de la madrugada del 25 de mayo se desencadenó tras una larga ingesta de alcohol.
"Ese día estaba trabajando cuando llegué a la casa en la tarde y me encontré con Julio en mi casa, a lo cual él me dice "te traje un regalo, Machete" y eran dos display de cerveza y unos pitos de marihuana", inicia el escalofriante relato.
"Antes de eso me había dicho un vecino que los habían visto besándose en otra población de Carahue y opté por confiar en mi señora (...) Nos fuimos a la parte posterior de la casa a fumarnos un pito con el Julio, mi señora no fumó. Yo le pregunté al Julio qué era lo que pasaba con mi señora, a lo que él dijo que no pasaba nada, que era su amiga, que la quería como una hermana (...) le dije que los habían visto besarse y me dijo que era mentira (…) me dijo que venía recién saliendo de la cárcel y que no se iba a meter en una relación donde ya llevábamos 11 años juntos".
"Entramos y nos pusimos a beber cerveza", continúa el relato de Rodríguez. "Ellos no tomaban mucho, yo siempre fui bueno pa´tomar. Me empecé a curar, luego se acabaron las cervezas, les dije "chiquillos tomémonos una botella de ron" y el Julio me dijo ¡Ya! Ellos se quedaron en la casa y la fui a comprar. Entonces me dijeron mejor no tomemos, mi señora lo halló fuerte y el Julio tampoco, porque según él ya estaba curao, y les dije, si no vamos a seguir tomando mejor nos acostamos que ya es tarde".
"Eran como las 2 de la mañana", recuerda el imputado. " Ya, dijo mi señora acostémonos, y me preguntó ¿qué va pasar con el Julio? Le dije que se quedara en el sillón".
"Me quedé dormido. De repente despierto para abrazar a mi señora y no la encuentro en la cama. Reaccioné de mi curadera (...) me levanté y la puerta que da a la pieza estaba semiabierta, miré hacia el living y la encontré sentada encima del Julio en ropa interior. Abrí una ventana y lo primero que pillé fue un hacha, la tomé y me dirigí a la cocina, les prendí la luz y mi señora salió corriendo. El Julio se sentó en el sillón y lo golpee con el hacha en la cabeza. Cuántas veces no me acuerdo…Mi señora fue a tomar el teléfono para llamar a Carabineros y allí se desató una pelea entre los dos, la tomé del pecho, le pegué un golpe de puño en la cara y luego encima de la cama la paré y le propiné 2 puñaladas en el pecho".
"Después de eso, y con tanto ruido se levantó mi hijo, pero yo sin pensarlo escuché al Julio que me decía "que le hiciste a mi mami, c...", y sin mirar tiré dos puñaladas para atrás y veo que mi hijo cae delante mío golpeándose en el cemento. Lo tomé en brazos, lloré con él hasta que falleció producto de las dos puñaladas que le pegué en el corazón... Luego mi hijo chico, que dormía en la cama matrimonial, el menor, lo asfixié con la mano tapándole la boca y la nariz y esperé que falleciera… después de eso me dirigí a la otra pieza donde estaba mi segundo hijo, el de 5 años. Yo andaba curao, todo ensangrentado, tomé a mi hijo que estaba desnudo en la cama y se me cayó de los brazos, golpeándose en un velador(...) ya estaba inconsciente, lo saqué de la pieza y me lo llevé a la pieza matrimonial y allí me desmayé y ya no me acuerdo que más pasó".
"Cuando reaccioné los vi a todos muertos y salí de la casa para comprarme unos cigarros y con un lazo me iba a ahorcar en un bosque al frente de mi casa, pero no pude, estaba tan cura´o que volví a mi casa… y de ahí no me acuerdo más hasta que estaba en el hospital".
La segunda jornada de este juicio se desarrollará a partir de las 9 horas de hoy, donde nuevamente la Fiscalía y defensa litigarán en torno a la demencia temporal de Juan Rodríguez Llancapán.