El rey Juan Carlos I firmó públicamente la ley por la que abdica del trono de España y culminó un proceso por el que hoy será sucedido por su hijo, que pasará a reinar con el nombre de Felipe VI.
El Palacio Real de Madrid fue el escenario de una corta pero solemne ceremonia en la que el monarca, de 76 años, rubricó la norma que las Cámaras parlamentarias habían aprobado y que hace posible su abdicación, después de 39 años de reinado.
Estaba previsto que la ley entrara en vigor en la madrugada de hoy, con su publicación en el Boletín Oficial, haciendo efectivo el relevo en la Corona española con el acceso al trono de Felipe de Borbón, de 46 años.
El Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, refrendó con su firma la de Juan Carlos I, en presencia de un centenar y medio de representantes de los poderes del Estado.
También estaban la reina Sofía, los todavía príncipes Felipe y Letizia, y las hijas de ambos, las infantas Leonor (ocho años) y Sofía (siete).
Con la solemne proclamación de su padre, la infanta Leonor se convertirá hoy en princesa de Asturias y heredera del trono.
Tras la firma de la ley de abdicación, el rey se fundió en un abrazo con su hijo, al que dejó su sitio en la presidencia de la ceremonia de su abdicación, como gesto que simboliza el traspaso en la Corona de España.
Los invitados prorrumpieron entonces en un fuerte aplauso, que Juan Carlos de Borbón recibió con gesto emocionado.
El acto solemne tuvo lugar en la Sala de Columnas del Palacio Real, en el centro de Madrid.