Quizá muchos de nosotros, en etapa escolar, visitamos alguna vez fábricas o empresas para conocer cómo se elaboraban productos de uso cotidiano como lápices, bebidas o alimentos. Esperábamos ansiosos el día de la visita, que además de sacarnos de la rutina escolar, nos acercaba a un sector aún desconocido para alumnos de educación básica.

Pese a que actualmente como gremio y en conjunto con nuestras empresas asociadas estamos desarrollando un plan de visitas guiadas a las cuales ya han asistido autoridades de Gobierno, funcionarios municipales, agrupaciones de boteros, liceos, asociaciones de estudiantes universitarios y familiares de trabajadores de la industrias, vemos necesario incluir al mundo escolar en este tipo de iniciativas.

Creemos que es muy importante mostrar desde niños a la comunidad escolar el desarrollo de una de las industrias más importantes de la zona sur, la cual genera más de 60.000 empleos en las regiones del sur de Chile.

Es por eso que hoy, y con la idea de potenciar una política de puertas abiertas y entregándoles la posibilidad a los niños de la Región, hemos comenzado un programa denominado 'Salmón con Mochila'.

La idea de este programa es que los alumnos de educación básica, de las comunas donde operamos conozcan nuestras instalaciones productivas, la vinculación con otros rubros productivos y la importancia de nuestra Región como maternidad de la industria del salmón. En este contexto, muchas escuelas formarán parte de esta iniciativa gracias al apoyo de nuestras empresas asociadas, las que guiarán a los alumnos por sus pisciculturas. Esto les permitirá relacionarse con una industria de alta tecnología, generadora de una importante fuente de empleos en La Araucanía y en donde, seguramente, muchos de sus padres laboran a diario.

Sabemos que también se aprende bastante fuera de las aulas, en terreno, conociendo, recorriendo y experimentando. Con esto abrimos la posibilidad a que los escolares, que aún no definen su futuro académico, se empapen del mundo del trabajo de una manera más concreta.

De esta forma, y al igual que con el Plan de Visitas Guiadas, esperamos acercarnos a nuestros vecinos, grandes y chicos, invitándolos a conocer el trabajo que realiza la industria del salmón y resolver las dudas que alumnos y profesores puedan tener sobre nuestro trabajo.

Se han dado a conocer estudios que indican la absoluta falta de compromiso de los peatones en el uso correcto de las calles y avenidas, concretamente cómo y por cuáles lugares cruzarlas, con el fin de evitar lamentables accidentes. En el último tiempo se han reiterado actitudes que han costado vidas humanas en siniestros de gran notoriedad a nivel nacional y local.

Cabe recordar que en las estadísticas de muertes en accidentes de tránsito un porcentaje sustantivo corresponde a peatones que han utilizado las arterias en forma inadecuada, por lugares no autorizados para el efecto.

La siniestralidad no es sólo un problema de conductores sino también de peatones. En Temuco es fácil apreciar que un alto porcentaje de personas -aproximadamente un 47 por ciento- cruza las calles a mitad de cuadra y uno superior no espera la luz verde para hacerlo en las esquinas, arriesgando su integridad.

Esta tan arraigada como negativa costumbre está claramente sancionada en la Ley del Tránsito, con multas que ascienden a los 42 mil pesos. Ocurre, eso sí, que jamás en Temuco se ha desarrollado una política de enseñanza y fiscalización de estas normas, de ahí que la gravedad del tema haya ido en aumento hasta llegar a una verdadera ley de la selva.

Conviene mencionar que la infracción de las reglas por parte de los peatones supone la presunción de culpabilidad por parte de ellos en casos de accidentes.

Hoy los paraderos de la locomoción colectiva son una mera referencia y el que los vehículos se detengan intempestivamente en cualquier lugar para tomar y/o dejar pasajeros es otra fuente de riesgo innecesaria; asimismo ocurre con bajar por el lado de la calzada, asunto absolutamente prohibido; todo pasajero debe subir o bajar sólo en las paradas y al ocurrir accidentes se presume su culpabilidad.

Una encuesta del Automóvil Club de Chile refleja todas estas faltas y los altísimos índices de desobediencia de estas normas básicas para hacer de las calles un lugar civilizado de encuentro y de seguridad para las personas.