El sueño de la población Tucapel
A inicios del siglo XX surgió la necesidad de parte del Estado por impulsar soluciones habitacionales, demandadas por la ley obrera. Se buscaba un tipo de vivienda simple y muy bien utilizada, no solo en cuanto a tamaño sino que también a diseño al tipo de materiales con los que sería construida.
Una de las propuestas con mayor aceptación fueron los huertos obreros como solución a la problemática de la vivienda popular. Este se fundaba en la filosofía de que cada grupo familiar debía acceder a una casa, una huerta y un jardín, espacios que debían ubicarse cercanos a caminos y líneas ferroviarias.
Este huerto obrero, fue concebido en la legislación habitacional de los años 30 y 40 como una unidad productiva, de carácter agrícola o industrial y debía permitir a las familias generar sus propios recursos para solventar los intereses de los compromisos financieros a los cuales se sometía el beneficiario. Desde los años 30 y a partir de las leyes de Fomento a la Edificación Obrera, se introdujo el huerto obrero, como unas de las soluciones habitacionales a las cuales el Estado destinaría recursos.
Es así como en Temuco, la Caja de Habitación Popular pone en marcha un programa en el sector norte, conocido como población Tucapel, construyendo tres etapas desde el año 1927 al 1940. El entorno presentó un alto valor urbano, por tanto, fue una propuesta innovadora cuya principal fortaleza apuntó a crear una ciudad jardín, generada a través de la fachada continua desde el inicio de su fundación y en oposición a la concentración urbana forjada por la creciente actividad industrial. Por otro lado, se transformó en una apuesta por abordar la naciente demanda de viviendas sociales mediante los postulados del movimiento moderno, convirtiéndose en un referente de la arquitectura colectiva del sur del país.
Gracias a la creación de una vivienda sólida se estimuló una mejora de la concepción de la solución habitacional generada desde el Estado, la cual se encuentra vigente hasta hoy. El proyecto iba unido a la creación de áreas verdes, lo cual fortaleció la vinculación con los vecinos, fortaleciendo la idea de barrio.
De esta manera, la población Tucapel, hoy transformada en barrio, por las distintas relaciones sociales que allí han emergido, es un referente en materia habitacional pública, sus viviendas presentan un alto valor arquitectónico por lo que se han convertido en un modelo habitacional hace más de 80 años. Historia que permitirá al Estado volver a invertir en un ejemplo de solución habitacional a través del Programa Quiero Mi Barrio, impulsado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo y así resguardar el valor que este conjunto presenta para Temuco.