Por un difícil momento -a sus cortos 9 años- debió atravesar la menor Catalina Mellado Ossandón, cuando el pasado lunes fue vacunada contra el Virus Papiloma Humano (VPH), pese a presentar un documento donde sus padres no autorizaban la administración de la vacuna.
La resistencia de sus progenitores se debía a que la menor, alumna de 4° básico del Colegio Innov-Arte, sufre de severas crisis de asma que en más de una oportunidad la han tenido al borde de la muerte, por lo que temían que la inoculación pudiera provocarle efectos adversos por su condición de alérgica a ciertas sustancias.
Sin embargo, eso no es todo. 'Existe mucha información acerca de que esta vacuna no es segura, que no está 100% probada y que es sólo comercio. De hecho, en Estados Unidos hay varios estados donde se ha dejado de administrar porque hay niñas que incluso han muerto', aseveró Alex Mellado, padre de Catalina.
A su juicio, si bien en el colegio conocen los problemas de salud que afectan desde pequeña a Catalina, en el momento de la vacunación había profesionales que al parecer desconocían la situación.
'Ella se puso nerviosa y dijo que sus papás no autorizaban que le pusieran la vacuna. Pero no se le tomó en cuenta, en especial por las funcionarias de salud que contra su voluntad y en medio llantos le colocaron la vacuna', sostuvo María Inés Ossandón, madre de la niña, quien agregó que 'aquí se vulneraron los derechos nuestra hija y nos sorprende la frialdad del personal de salud para quienes los niños son sólo una estadística y nada más'.
colegio
Sobre el actuar del colegio, Alex manifestó que 'ellos han reconocido su error y que debieron haberse comunicado con nosotros para aclarar la situación antes de vacunar prácticamente a la fuerza a la Catita'.
Una versión distinta es la que tiene la directora del Colegio Innov-Arte, Millaray Trapp, quien sostuvo al respecto que la estudiante no mostró ninguna documentación para que no fuera vacunada, pese a que la carta fue enviada hace un mes a los padres.
La encargada sostuvo que el establecimiento siguió el protocolo de salud del Minsal y que se envió la circular a la casa, la que no llegó firmada. 'El alumno llegó hoy (ayer) sin el documento, nosotros pedimos las disculpas correspondientes y dimos el caso por cerrado'.
En cuanto a los pasos a seguir tras este episodio, los padres de Catalina afirman que se han contactado con otros apoderados a través de la página web de los vecinos de Fundo El Carmen, quienes junto con manifestarles su apoyo, tampoco están de acuerdo con la administración obligatoria de la vacuna.
'Estamos analizando en qué instancias vamos a denunciar, si a nivel de Salud o de Educación, porque resulta extraño que se les haga firmar un documento a los padres que luego no es respetado, eso no puede ser', dicen.
vacuna
La campaña de vacunación contra el Virus Papiloma Humano (VPH) comenzó en septiembre tras ser incorporada gratuitamente al Plan Nacional de Inmunizaciones.
La vacuna está destinada a todas las niñas de 4°año básico, con el propósito de protegerlas contra el cáncer de cuello del útero y otras enfermedades causadas por el VPH como las verrugas genitales.
En cuanto a su obligatoriedad, según un documento emanado desde la División Jurídica de la Subsecretaría de Salud Pública, el artículo 32 del Código Sanitario faculta al Presidente de la República para 'declarar obligatoria la vacunación de la población contra las enfermedades transmisibles para las cuales existan procedimientos eficaces de inmunización'.
Si bien la Ley 20.584 de derechos y deberes de los pacientes prevé la posibilidad que las personas puedan negarse a recibir un tratamiento o procedimiento, de lo que debe dejarse constancia por escrito; esta facultad está restringida en el artículo 15 del mismo cuerpo legal cuando los procedimientos supongan un riesgo para la salud pública que es precisamente el caso de las vacunas.
Para el diputado RN Jorge Rathgeb, miembro de la Comisión de Salud de la Cámara Baja, efectivamente es una política pública que tiene carácter de obligatoria.
'Sin embargo, el documento que firman los padres en este caso donde autorizan o rechazan la vacuna, en definitiva es un respaldo para el Ministerio en caso que alguna menor presente efectos adversos. Si los padres no han autorizado y hay alguna reacción, pueden iniciar acciones administrativas, civiles e incluso penales', dijo el parlamentario.
A nivel nacional ese año se vacunarán aproximadamente 120 mil niñas, pero a partir de 2015 se administrarán 250 mil dosis cada año (1ª dosis a 4° básicos y 2ª dosis a 5° básicos). Desde la Seremi de Salud de La Araucanía se informó que el total de niñas a vacunar es de 7 mil 245'.
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