Desafíos del Hogar de Cristo
El Hogar de Cristo acaba de cumplir 70 años de vida. Fue fundado un 19 de octubre de 1944 por el padre Alberto Hurtado, quien conmovido por las necesidades que existían en el país decidió emprender una iniciativa que permitiera acoger con amor y dignidad a los más pobres de entre los pobres, ampliando así sus oportunidades a una vida mejor. Esta noble tarea el Hogar de Cristo la mantiene vigente y consolidada pero como las necesidades son cada día mayores, se requiere de la ayuda de la sociedad, personas e instituciones que asumen que la responsabilidad social con los más excluidos es de todos y de alguna manera entregan su aporte como voluntarios o socios colaboradores para llevar respeto, justicia y solidaridad al más necesitado.
El nuevo aniversario de la institución no pasó desapercibido en la capital regional y en el Jardín Infantil Nazareth del sector Amanecer -uno de los tres que el Hogar administra en la Región- se reunieron autoridades, voluntarios y trabajadores de la fundación quienes, en una jornada de esparcimiento, reflexión y reconocimiento de la labor que desempeñan, reafirmaron el compromiso institucional con la obra del Padre Hurtado.
En la misma ceremonia se hizo el anuncio que en esta vocación por asistir a los más necesitados el Hogar de Cristo creará la Fundación Rostros Nuevos -que se suma a las otras cuatro ya existentes- y se encargará de trabajar con personas adultas con discapacidad mental y psíquica. Pero para el éxito de ésta, como de todas las iniciativas emprendidas, se requiere del apoyo de la comunidad.
Surge entonces el desafío de captar más socios ya que la institución hoy cuenta con 15 mil colaboradores que mensualmente aportan con una cantidad de dinero que permite financiar las necesidades de los más desposeídos de la Región, pero esos dineros se hacen insuficientes y el déficit de socios para sustentar la autonomía del Hogar de Cristo en La Araucanía se calcula en un 25 por ciento. Es necesario que los temuquenses valoren en su real dimensión al Hogar de Cristo y hagan suyas las necesidades de la institución, y por consiguiente que ese ser sufriente que no posee más ayuda que la brindada por una mano generosa, pueda optar a una vida un poco mejor. La Cena Pan y Vino en Temuco será el próximo 11 de noviembre en el casino Dreams y es una buena oportunidad para dar el primer paso y comenzar a ayudar.