Cherry siente que está mucho más madura que en su época ligada al programa Mekano y al grupo Porto Seguro. La brasileña se alejó hace rato de la televisión, de la farándula y se concentró en una labor que le fascina: la de instructora de zumba.
La nacida en Sao Paulo empezó con sus clases en Chillán y ahora tiene alumnos en Temuco. "Estoy bien motivada con mis clases. En la zumba he encontrado un espacio para desarrollarme", dice la brasileña, que se radicó en la capital regional junto a su esposo Adán Vergara -defensa de Deportes Temuco- y sus dos hijos.
A sus 37 años, Rocheli de Paula -su verdadero nombre- trabaja tres veces por semana con un grupo integrado principalmente por dueñas de casa en el gimnasio del Liceo Comercial del Desarrollo.
"Tengo un grupo que está motivado y que es bien responsable", remarca la instructora de zumba en conversación con El Austral.
- El movimiento de zumba está siempre buscando la manera de que la gente se mantenga en forma, pero no es sólo eso. Entrega alegría y hace que las personas se sientan más felices. Hay estudios de la empresa zumba que dicen que esta especialidad ha ayudado a combatir la depresión entre las mujeres. La zumba ayuda a mantenerse en forma y también entrega ánimo.
baile o deporte
- La zumba es una mezcla de movimientos alegres con el fitness y por lo tanto la considero un deporte. El creador de zumba juntó música como el reggaeton, salsa y merengue con el fitness. Como instructores certificados recibimos material de Estados Unidos y trabajamos los mismos segmentos en todos lados
- Hay una pauta clara que seguimos en todo el mundo. Sin embargo, el instructor tiene la facultad de hacer variaciones y de hacer hincapié en algún ritmo en particular. En mi caso, por la formación que tengo, trabajo mucho con el axé y con los ritmos brasileños.
- En una clase de zumba se queman entre 500 y 1.000 calorías. Todo depende de la intensidad con que se trabaje. Los resultados de quienes participan en los entrenamientos se ven en un mes o dos. Además de servir para bajar de peso también ayuda a la tonificación de la musculatura.
-Me ha ayudado un montón. Durante mis embarazos subí harto de peso y eso me complicó un poco. Después, con las clases de zumba, recuperé la forma. A quienes participan en mis clases siempre les recomiendo que complementen el ejercicio con una alimentación sana. Además les digo que hagan cosas simples como subir o bajar las escaleras en vez de utilizar los ascensores. Todos esos detallitos son bastante útiles.
- Yo creo que pasa más por un tema cultural. Muchos hombres sienten que las rutinas relacionadas con el baile son exclusivas para mujeres y no es así. En mis clases, por ejemplo, llegan señoras con sus esposos. Ellos, de primera las esperan, y después también se atreven a participar en las clases. Con los niños pasa un poco lo mismo. Los hijos de mis alumnas llegan como acompañantes a las clases y después también participan.
alejada de la tv
- En la vida todos pasamos por etapas. Yo estuve en un momento en la televisión y ahora estoy en una etapa más tranquila. Soy mamá, tengo dos hijos y también tengo un esposo. Para mí lo más importante es la familia.
- La verdad es que me acostumbré a una vida distinta. La etapa de la televisión es cosa del pasado para mí. Ahora disfruto de mi familia y de las clases de zumba. A propósito, déjame pasar el aviso. Invito a todas las personas que quieran practicar zumba a las clases que dicto los lunes, martes y jueves de 20 a 21 horas en el Liceo Comercial del Desarrollo. Cobro 1.000 pesos por clase. Es un valor económico y al alcance de todos.
Durante su paso por la televisión, Cherry tuvo apariciones permanentes en dos programas: Mekano y Siempre Contigo. "Trabajé en la televisión entre los años 2002 y 2004. Estuve en Mekano y también participé en el programa Siempre Contigo con el "Pollo" Fuentes", recuerda la brasileña radicada en Temuco. Después de esa etapa acompañó a su esposo, el futbolista Adán Vergara, en su paso por clubes de Suiza, China y Venezuela. "Me gustaría volver a la televisión en algún momento, pero con una labor distinta. Me encantaría hacer algo relacionado con salud y deporte. Ojalá tenga la oportunidad de compartir todo lo que ha aprendido de zumba y del deporte en general", remarca la brasileña.
37
años tiene Cherry.
La nacida en Sao Paulo cumple labores como instructora de zumba.
3
clases por semana
dicta Cherry en el gimnasio del Liceo Comercial del Desarrollo.
500
a 1.000 calorías son
las que se pierden en una clase de zumba de una hora.