Ya es un hecho que tendremos nuevo plan de descontaminacion del aire ( PDA) para material particulado 2.5 para Temuco y Padre Las Casas. Junto a otros actores políticos y sociales iniciamos una consulta ciudadana diferente a la formal, donde surgió como tema relevante la molestia que generó la propuesta de eliminar las cocinas a leña al año 2023. Se hicieron las observaciones y participaron muchos clubes de adultos mayores y dirigentes sociales, entre otros. Para beneplácito de los ciudadanos del sur de Chile y su cultura de cocinas a leña, éstas podrán continuar su uso, aunque con nuevas tecnologías. Esto es también una buena noticia para los empresarios de estufas y cocinas de Padre Las Casas y Temuco.
Queda a firme el hecho que el nuevo plan no cambia los ejes en lo esencial, excepto cuando traslada en el plan de medidas la decisión de control de los "humos visibles" a la autoridad política-administrativa en la figura del seremi y del intendente, y no en el Ministerio de Salud. Este plan contiene entre sus propuestas el uso de calefacción distrital, medida potente y eficaz.
No debiera llevarse adelante ningún proyecto colectivo de vivienda desde el 2015 donde esté involucrado el Ministerio de Vivienda u organismos del Estado sin tener calefacción con esta modalidad a costa de fondos públicos, ni edificios sede de organismos públicos que no sean con normas de eficiencia energética y/o calefacción con combustibles limpios.
Este plan no recoge la propuestas del municipio de Temuco en orden a instalar convertidores catalíticos para estufas con templador y uso de leña seca, donde la administración municipal y el Concejo Municipal han hecho un enorme esfuerzo financiero, social y ambiental para disminuir los niveles de material contaminante.
Tampoco acepta el subsidio a leña seca o biomasa, o combustibles limpios a grupos de personas de los primeros tres quintiles.
Estamos frente a un buen plan para el siglo XX, pero ya estamos en pleno siglo XXI. He sostenido que el que tiene más debe desembolsar más en descontaminar. No es posible tratar a todos por igual ni realizar las mismas exigencias a todos los habitantes de ambas comunas. En resumen, este plan no colabora en terminar con esta expresión de desigualdad ambiental y probablemente empuja a los que tienen menos a seguir usando leña húmeda. Hubiese esperado más de un plan de descontaminación del aire para el siglo XXI. De todas maneras es una buena noticia del año 2014.
Ricardo Celis,