La de ayer en la sala 2B del Juzgado de Garantía de Temuco fue una de las audiencias más tensas por el caso de Erica Hagan (22), asesinada al interior del Colegio Bautista el pasado 5 de septiembre con sendos golpes en su cabeza. Si bien el magistrado Luis Olivares decidió mantener la prisión preventiva para Domingo Cofré, también aceptó la solicitud por parte de la defensa de realizar nuevas diligencias.
Dichos peritajes - solicitadas en una audiencia de revisión de medidas cautelares - consistirán, según la defensa del técnico jurídico, en la realización de nuevos peritajes fotográficos que deberán realizarse en un plazo máximo de 10 días al interior del Colegio Bautista de Temuco, entre las 20.30 y 22 horas, debiendo ser informados los intervinientes con 48 horas de anticipación, según estipuló el magistrado Olivares.
Ante la solicitud por parte de los nuevos abogados de Cofré, Javier Jara Müller y Luis Felipe Romero, el abogado del Colegio Bautista, Manuel Morales, (querellante en la causa) se negó a dichas diligencias por considerar que 'se inició el año escolar' para luego agregar que aquello 'provocaría un grave conflicto dentro de la comunidad que ya se ha visto complicada con la constante visita de peritos, fiscales y una serie de aspectos que complican al establecimiento', dichos que motivaron una reprobación total por parte de Cofré, quien en todo ese lapso movió su cabeza incrédulo ante los dichos del litigador del Bautista.
Pese a ello, el magistrado le otorgó a la defensa la realización de dichas pericias, las que serán lideradas por la nueva defensa del ex trabajador del Bautista.
Bastante extensa fue la audiencia de revisión de medidas cautelares en el Juzgado de Garantía. Fueron más de 80 los minutos en donde el Ministerio Público y la nueva defensa del ex rondín mostraron sus cartas ante el magistrado Olivares.
En su estreno, los abogados Jara Müller y Romero, apuntaron sus dardos a la investigación realizada por la Fiscalía, señalando que en ella 'hubo negligencias del porte de una casa'. Para graficar aquello, los juristas se centraron en los peritajes de ADN realizados a Cofré y en cómo se ejecutó la cadena de custodia del atizador (arma señalada por el Ministerio Público como la ocupada por Cofré para dar muerte a la psicóloga) agregando que el arma no fue recibida por el Servicio Médico Legal.
Sobre este último punto, Javier Jara Müller no dudó en señalar que hubo 'una pésima manipulación de la evidencia' criticando la forma en cómo se transportó el atizador para ser periciado, señalando que fue en una bolsa de papel y que por tal motivo era 'posiblemente contaminable'.
La defensa además hizo hincapié en unos peritajes a una zapatillas de Harald Gutiérrez, padre de uno de los amigos de Hagan en Temuco, las cuales tenían rastros de sangre de la psicóloga, criticando que la Fiscalía no hizo lo suficiente por buscar más aristas del caso, hecho que fue refutado por el Ministerio Público aduciendo que de dichas muestras 'no se obtuvo ADN en cantidad suficiente para realizar el proceso de amplificación'.
Concluido su tiempo de alegato, fue el turno de la Fiscalía. El encargado de responder fue Miguel Ángel Velásquez, quien no dudó en calificar la exposición de la defensa como un 'muy bonito alegato de clausura' para luego ir al fondo de sus argumentos.
Velásquez, luego defendió el actuar de la Fiscalía y la PDI, señalando que el atizador sí fue llevado al SML, explicándole al magistrado que lo señalado por la defensa de Cofré se 'contrapone lo que dice la doctora Nubia Riquelme, que señala lo siguiente: fue traído a este servicio (SML) por personal de la PDI el día 8 de septiembre un bolso de papel un atizador de metal de color ligeramente amarillo'.
Fue así como Velásquez detalló que existieron dos salidas de Cofré desde su garita, de 8 minutos con 18 segundos y una segunda de 7 minutos y un segundo, tiempo que a juicio del persecutor fue suficiente 'para realizar toda la acción que el Ministerio Público le está imputando conforme a un informe policial de la Brigada de Homicidios de la PDI'.
En la oportunidad el fiscal además expuso que un peritaje hecho por el Lacrim de la PDI, dio cuenta de la existencia de una hoja de encino y que estaba en la ruta que hizo Cofré hacia el departamento de Hagan, elemento que fue encontrado en uno de sus zapatos.
Una de las principales declaraciones de Velásquez ante el magistrado se centró en describir los momentos en que Hagan era atacada por su victimario, hecho que fue relatado por el persecutor según un peritaje del Labocar.
'Los actos agresivos se registraron en un periodo cercano a los dos minutos. Los actos de traslado del cuerpo a la tina y de material hacia y dentro de la estufa han requerido de a lo menos 5 minutos. Los desplazamientos del guardia de la garita generan intervalos compatibles con los tiempos requeridos para realizar los actos cometidos contra la afectada y en el sitio del suceso', precisó Velásquez.
El informe del Labocar además es lapidario al señalar que 'no hay evidencias que permiten suponer la participación de un segundo agresor en la comisión de estos hechos, sentenció el fiscal Miguel Ángel Velásquez.
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