Comunicación al interior del hogar
Un caso que tiene en alerta a la Fiscalía y a Carabineros es la desaparición hace 33 días de dos hermanas de 12 y 13 años. Las niñas -porque eso es lo que son aún- salieron desde su hogar con dirección al colegio el 12 de marzo y desde entonces no se ha vuelto a saber de ellas. Su madre, tras hacer la denuncia ante la policía, contó a este Diario que luego de recibir un llamado desde el colegio, consultándole por qué una de sus hijas no había llegado a clases, comenzó una odisea que hasta hoy la tiene sumida en una profunda angustia. Y no es para menos.
Otra arista de este caso es que no sólo se ha hecho público a través de los medios de comunicación, sino que también fue tomado por las redes sociales y hoy la comunidad usuaria de estos medios está en alerta y pendiente del caso de las niñas de Pedro de Valdivia.
Sin embargo, una pregunta que surge ante este caso -de constarse que fue un abandono voluntario del hogar- y otros similares que con frecuencia ocurren en la Región, es cómo evitar que los niños o adolescentes realicen acciones de este tipo, donde sin aviso se van de la casa exponiéndose a todos los peligros que ello conlleva.
La respuesta la entregan desde la Tenencia de Menores y Familia de Carabineros, donde la oficial a cargo expone un tema clave que podría ayudar a evitar acciones de este tipo, y esta es la comunicación.
Porque una de las formas de evitar que los niños y adolescentes tomen malas decisiones es manteniendo una comunicación fluida y cercana con ellos, de manera de estar al pendiente de ciertos aspectos que afecten a los hijos y los lleven a emprender acciones erradas. Más en la edad de la adolescencia, cuando comienzan a buscar su propia identidad y en este proceso podrían relacionarse con pares inadecuados.
Otro aspecto importante -y que conviene tener presente- es el uso de las redes sociales. Si bien hoy éstas ayudan a difundir la pérdida y búsqueda de menores perdidos, también pueden influir en que los niños generen vínculos con personas desconocidas que sean una mala influencia en ellos, por lo que los padres deben estar pendientes de verificar con quiénes se relacionan sus hijos en redes sociales y tener un control de qué páginas visitan. De estas acciones, más una buena comunicación al interior del hogar, depende que los hijos no cometan acciones que revistan peligro para ellos y sus familias.