Centros de esquí: el potencial que falta por explorar en la Región
entre volcanes. Sólo Corralco, en Curacautín, y Las Araucarias, en Vilcún, son los centros de esquí que funcionan hoy en la Región. Pucón no pudo abrir por las alertas tras la erupción del Villarrica, y Los Arenales hoy es un centro de invierno para pasear y disfrutar de la nieve... sin esquiar.
En una paradoja total, las intensas nevadas de este invierno en la zona cordillerana de La Araucanía, así como la falta de nieve en los centros de esquí en la zona central, han sorprendido a la Región en su peor momento en esta materia: de 4 centros de esquí que existían hace apenas unos años, hoy sólo dos funcionan como tal.
Los motivos apuntan a variables muy distintas. Mientras las restricciones tras la erupción del volcán Villarrica impidió que se abrieran las puertas del Centro de Ski Pucón, en Lonquimay el ex centro de esquí Los Arenales hoy es un centro de invierno donde los esquíes se cambiaron por trineos de facturación manual y raquetas de caminatas.
Así las cosas, la enorme demanda por el esquí y el snowboard que se ha generado este invierno, es absorbido por dos centros cordilleranos: Corralco, en Curacautín, en los faldeos del volcán Villarrica; y Las Araucarias, en Vilcún, en los faldeos del volcán Llaima.
El primer centro de esquí damnificado este invierno es el Centro de Ski Pucón, donde la naturaleza fue la causa de la no apertura de este tradicional centro de invierno.
La génesis de esta situación tuvo su origen en el verano, específicamente en la madrugada del 3 de marzo, cuando el volcán Villarrica entró en erupción por 45 minutos, suficientes para poner en alerta a los organismos de emergencia e instalar restricciones que a la larga impidieron la apertura del centro de esquí.
Pucón, sus autoridades y empresarios del turismo, decidieron ponerle buena cara a la adversidad y es así que han buscado opciones invernales distintas, desde fiestas como la del chocolate, hasta incursiones por volcanes vecinos a fin de mantener ofertas atractivas para los amantes de las actividades outdoor. Sin embargo, las 20 pistas para practicar esquí y snowboard con que cuenta este centro de invierno administrado por el Gran Hotel Pucón Resort & Club, permanecerán inactivas en la falda de un volcán sobre el que todavía pesa una alerta amarilla.
Una situación diametralmente diferente es la que ocurrió en el Centro de Esquí Los Arenales, que hasta unos 5 años era la oferta de la Provincia de Malleco, con sus cuatro andariveles de arrastre y espectaculares canchas para esquí randonnée y de fondo.
Inaugurado el año 2000, una serie de desencuentros entre los distintos gobiernos municipales hizo que a partir del 2010 estas instalaciones quedaran a la deriva en medio de la montaña, pasando finalmente de forma oficial a mediados del año pasado a manos de una comunidad pehuenche, que se hizo cargo de la administración. Hoy, el centro de esquí giró hacia un concepto ecoturístico de "parque invernal", donde los esquíes han sido cambiado por trineos hechizos y raquetas de caminata.
¿Cómo afectó la pérdida del Centro de Esquí Los Arenales a Lonquimay y al turismo regional? El alcalde de Lonquimay, Guido Barría fue el gestor de ex centro de esquí y testigo de su ocaso.
"Esta es la segunda ocasión en que soy alcalde", acota Barría, quien agrega que "en mi primera gestión estaba convencido que había que encontrar los rumbos para la sustentabilidad de la comuna y allí estaba la posibilidad de hacer turismo en invierno y verano, ya que la nieve es un bien escaso en Chile. Así, el 96 y en un predio de propiedad municipal levantamos una cafetería e instalamos andariveles con recursos propios".
El concepto - asegura el alcalde- "fue crear una alternativa para gente de clase media, pues en esa época esquiar era un tema imposible si no se tenían altos recursos. También se hizo una escuela de esquí alpino, donde los chicos de Lonquimay fueron campeones varios años".
Según lo señalado por Barría, la calidad de nieve y las buenas pistas, dieron paso a un gran flujo de turistas y creció el comercio. "Pero el resto de la comuna no estaba tan convencida, y creo que allí fallamos, al no asegurar ese aspecto importante de convencer a nuestros vecinos", señala el alcalde, quien agrega que "cuando dejé la municipalidad comenzó a decaer el interés en Los Arenales y finalmente el alcalde anterior (Guillermo Vásquez), el último día de su mandato, tomó un acuerdo con una minoría de los concejales y entregó las instalaciones a una familia de una comunidad indígena".
Barría señaló que "a partir de allí se han hecho esfuerzos por apoyarlos, pero la verdad es que no ha repuntado y desde hace bastantes años que los andariveles han dejado de funcionar. Es propiedad municipal, pero en ese lugar no hemos podido hacer ningún tipo de acercamiento, y no podemos arriesgar recursos del Estado en inversiones que no se aseguren que van a cumplir con lo comprometido. Por eso decidimos dar un paso al costado, más cuando con complacencia de ellos no nos involucramos, aparte que ellos no quieren que nosotros estemos presentes".
¿Qué existe hoy en Los Arenales? Dada la nula presencia de información actualizada en internet -de hecho, sigue apareciendo como centro de esquí- y la opción del municipio de descolgarse de su funcionamiento, la mayoría de los visitantes llegan por los comentarios del boca en boca o simplemente porque en su paso por Cuesta Las Raíces se encontraron con la majestuosa casona y el letrero anunciando el parque ecológico.
A 8 kilómetros del centro de Lonquimay, lo primero que llama la atención es la presencia de la bandera mapuche flameando junto al pabellón chileno, estableciendo desde la entrada las características únicas de este lugar. Y es que los administradores -pehuenches- han querido instalar el sello de su cultura junto al concepto de oferta familiar para disfrutar de la nieve a bajo costo.
No hay esquíes ni tablas de snowboard, al menos por ahora. En su lugar, en los muros de la casona reposan los maullos (raquetas pehuenches para caminar en la nieve) y a las afueras, algunos trineos rústicos confeccionados en madera y metal. Por mil pesos, entrada general, la inmensidad de Los Arenales está a disposición de los visitantes.
Sergio Porma, presidente de la Asociación Ecoturística Los Arenales, señala que "creo que estamos avanzando, para haber partido de cero. Es así que este año ya hemos logrado comprar alguna implementación con recursos que nos proporcionó Conadi, y también tenemos el apoyo de la Gobernación de Malleco. Lamentablemente, la autoridad comunal, el municipio, no le ve la importancia a nuestros esfuerzos".
Actualmente Los Arenales ofrece por mil pesos cientos de hectáreas para recorrer. Sin embargo, poco queda de lo que fuera el protagonista de las antiguas instalaciones, el esquí. Montaña arriba descansan, inactivos, los postes que sustentaban los andariveles, y tampoco hay esquíes para arriendo, aunque a mediados de esta semana llegaría una partida, gracias al apoyo de amigos de estas comunidades.
"Pero si bien nuestra idea apunta a un parque de nieve, eso no quita que pensemos a futuro en la creación de un centro de esquí intercultural administrado por comunidades mapuche", señala Porma, quien agrega que "por ahora, nuestra oferta contempla gastronomía local, artesanía, ofrecemos trineos artesanales y caminatas con maullo. Y la próxima semana nos llegan equipos de esquí y pronto una motonieve. Pero esto es lo que tenemos que ofrecer al turista, lo básico. No queremos engaña r a nadie, esto no es un centro de esquí".
Pese a la poca publicidad en torno a la nueva oferta de Los Arenales, llegan turistas incluso desde Argentina, como es el caso de Flavia Navarro, quien viajó junto a su familia desde Neuquén.
"Se terminaron las vacaciones de invierno, pero quisimos venir a Chile y por Pino Hachado cruzamos a Lonquimay. Por un planito que vimos por allí supimos de Los Arenales, y vinimos. Mi hijo Ignacio (4) no conocía la nieve, y está feliz".
A río revuelto, ganancia de pescadores. Así lo entienden en Corralco y en Las Araucarias, únicos centros de esquí en pleno funcionamiento en La Araucanía, que están absorbiendo la oferta.
Ya en la inauguración de la temporada de invierno para La Araucanía, el administrador general Las Araucarias, Guillermo Troncoso, señalaba que "el 1 de julio dimos inicio a la temporada, y pese a que el clima ha estado bastante inestable, hemos tenido buena afluencia de público".
Su par de Corralco, el gerente general James Ackerson, a poco más de un mes de la apertura de este centro de esquí , señaló que "tanto por el tema del volcán Villarrica que impidió que abriera el centro de esquí puconino, como por la falta de nieve en la zona central, hemos tenido una afluencia de público bastante fuerte".