Caso Haeger: Fiscalía acusa a Anguita de manipular el cuerpo de su esposa
CRIMEN. Tanto el ingeniero como el supuesto sicario, José Pérez, quedaron con prisión preventiva. La investigación durará ocho meses por su complejidad y el tribunal determinó que el relato del carpintero es "coherente".
En prisión preventiva quedaron el ingeniero Jaime Anguita y José Pérez Mancilla, el supuesto sicario que habría asesinado a la esposa del profesional, la contadora Viviana Haeger (42) en junio de 2010, en Puerto Varas.
Ambos fueron formalizados por los delitos de parricidio y homicidio calificado, respectivamente, en el Juzgado de Garantía de Puerto Varas. La jueza Ximena Bertín aceptó la solicitud de la Fiscalía de otorgar ocho meses para la investigación, por la complejidad del caso.
Los imputados quedaron privados de libertad, porque la magistrada consideró que son un peligro para la sociedad por la gravedad de las penas que arriesgan, que en el caso de Anguita puede llegar incluso a perpetua calificada. Asimismo determinó que quedaran en módulos separados como medida de seguridad.
Esto luego de que la jueza Bertín concluyera que los antecedentes recogidos por el Ministerio Público son suficientes para presumir la participación de Pérez como autor material del crimen y de Anguita como autor intelectual.
Los fiscales Naín Lamas y Marcos Emilfork encabezaron la audiencia de formalización, que se extendió por casi cinco horas.
El carpintero declaró el lunes que dio muerte a la contadora de Puerto Varas por encargo de Anguita, acordando un pago de $5 millones, de los que finalmente le canceló $2 millones.
Detalles del crimen
Durante la audiencia, el fiscal Lamas detalló que el presunto sicario utilizó una bolsa para dar muerte a Haeger por sofocación y que el crimen fue planeado por Anguita, que habría instruido a Pérez para cometer el homicidio.
Luego de asesinar a Header, relató el persecutor, Pérez debía llamar a Anguita desde una cabina sin cámaras y decirle que su esposa estaba en peligro, lo que fue llevado a cabo tal como estaba previsto.
El fiscal Emilfork, en tanto, detalló que Pérez decidió dejar a la víctima en la buhardilla de la casa, donde fue hallada 42 días después de su muerte, porque no sabe manejar ni tiene auto, por lo que siguiendo las instrucciones de Anguita de "matarla y hacerla desaparecer", tomó la decisión de esconderla en el entretecho.
Pérez además detalló que Anguita no sabía que el cuerpo estaba ahí y que no se lo dijo porque temía que no le pagara lo acordado. En la audiencia además se relató que el carpintero habría accedido a cometer el crimen que confesó, para solventar los gastos de una enfermedad de su pareja.
La Fiscalía enfatizó que ambos imputados se conocían y tenían una extensa relación laboral, la que fue confirmada por la pareja de Pérez. Asimismo, constataron que existe registro de llamadas entre ambos en abril de 2010, dos meses antes del asesinato.