'Fentxen Mañum': la resurrección de 'La Fábrika' Subcultural'
CULTURA. Tal como 'La Fábrika', su ilustre antecesor, el colectivo de Ziem 2440, ofrece talleres muy diversos.
El año 2001, en Temuco, una serie de hechos relacionados con el arte habían ilusionado a los historiadores del futuro. Quizá el más relevante de todos fue la instalación, por parte de un grupo de jóvenes, de la llamada 'Fábrika Subcultural', en el recinto de las ex Cecinas Rendel de O'Higgins 1155.
'La Fábrika' devino al poco andar, entonces, un colectivo de arte, cofradía abierta o comunidad destinada a enseñar o difundir disciplinas como danza, pintura, audiovisuales, teatro, o expresiones musicales como rock o percusiones, y sus integrantes remodelaron notoriamente el espacio que les fuera cedido por el entonces dueño y que hasta antes de la irrupción de éstos (llegaron a vivir hasta 20) fuera, según Carabineros, "uno de los tres sitios negros de Temuco".
Y fue así como los artistas y gestores de 'La Fábrika' se establecieron allí en dos etapas, una entre 2001 y 2005, y la otra entre 2008 y 2011, cuando fueron expulsados.
La expulsión
Sucede que tras la muerte del dueño, que les había cedido el espacio pero sólo de palabra se decidió expulsarlos. Sin embargo, tras muchos dimes y diretes y la intermediación de varios actores políticos, finalmente los ex 'Fábrika -escrita con K a raíz de la simpatía de muchos de ellos con el anarquismo filosófico- pudieron agenciarse, mediante la figura de Cesión de Uso Gratuito de la Seremi de Bienes Nacionales, un espacio en calle Ziem, a la altura del 2440, en el mítico barrio de Pueblo Nuevo.
El artista visual Felipe Christensen, uno de los gestores más reconocibles de ambos proyectos, puntualiza que "en 'La Fábrika' estábamos más enfocados en un trabajo de intervención del espacio cotidiano (destaco la 'Fiesta Afrodisíaka' y la 'Fiesta de la Primavera', realizada en Santa Rosa) y en los recitales de rock. Hicimos muchos, pero hacia el final ponderamos que el tema de los talleres comunitarios -de una multiplicidad de tipos que iban desde el mapudungun a la permacultura, y desde la edición de videos hasta la pintura, la música y la literatura"- era fundamental. Ahora seguimos apelando a la asociatividad y a una suerte de reciclaje... material y también espiritual".