Gerente de Gersa: "Estamos cumpliendo con la normativa"
ALTERNATIVA. Empresa es una de las que se presentó a la licitación para el manejo de basura en Temuco. Alcalde de Lautaro afirma que no recibirán los residuos.
En diciembre del año pasado Gersa fue una de las dos empresas (junto a WTE Araucanía) en presentar una propuesta a la licitación de la Municipalidad de Temuco, que tiene por objetivo buscar una solución limpia al manejo de la basura, por el cierre del vertedero de Boyeco, que se efectuará a fines de este año.
Una empresa que cuenta con 21 años de experiencia en el servicio de gestión ecológica de residuos a nivel nacional (17 de los cuales se ha desempeñado en la Región) y que además el 2013 llevó a cabo en Til Til la Planta de Tratamiento Integral de Residuos Cerros La Leona (ver fotografía), proyecto que -con distintas dimensiones- se replicaría en la comuna de Lautaro, en caso de adjudicarse la propuesta.
Según contó el gerente general de Gersa, Antonio Quer, "con este proyecto nosotros aprovechamos la experiencia que tiene la empresa (...). Hemos llevado a cabo varios proyectos tanto en relleno sanitario como en lo que es gestión de residuos, que es nuestra especialidad".
El proyecto cuenta con una inversión de $15 mil millones, que se ejecutarán durante los 20 años de vida de la iniciativa (según la licitación), costo que incluye la obra inicial, las ampliaciones, la maquinaria necesaria para operar y las obras de cierre.
Quer también destacó que el terreno en el que se emplazará corresponde a un área rural del 100 hectáreas, situada a 5 kilómetros de la ciudad y alejada de urbanizaciones. Del total, 27 serán las hectáreas destinadas a la infraestructura de depósito de residuos, con una capacidad de 13 mil toneladas mensuales. De acuerdo a la propuesta, en el resto del terreno se desarrollarán proyectos de paisajismo y franjas perimetrales.
Además, el gerente fue categórico en señalar que "nuestro proyecto tiene sustentabilidad económica (...). Hay muchas experiencias de relleno sanitario, nosotros tenemos la nuestra, y sabemos que no hay imprevistos. Esta tecnología está probada, no sólo en Chile, sino también en el resto del mundo".
OPOSICIÓN
Actualmente, la votación del proyecto, que debe llevar a cabo el Concejo Municipal de Temuco, se encuentra detenida, debido a que los concejales Raúl Schifferli y Cristian Herrera interpusieron un recurso de protección, por considerar inadecuado que ambas propuestas tengan considerado operar desde Lautaro.
Una oposición a la que se suma el alcalde de la comuna, Miguel Jaramillo, quien aseguró que "las dos soluciones que se proponen afectan terrenos de nuestras comunas que están próximos a comunidades mapuches, causando un importante impacto medioambiental. Lautaro no está dispuesto a ser zona de sacrificio medioambiental de la Región".
El edil agregó que la Municipalidad de Lautaro llevará a cabo "todas las acciones necesarias, ya sean técnicas, administrativas, jurídicas y políticas para impedir la puesta en marcha de estos proyectos. Un gigante como Temuco, que emite más de 155 mil toneladas de residuos al año, no puede imponer una solución a su problema de la basura sacrificando a una comuna vecina como Lautaro. Además, ninguna de las empresas da las garantías necesarias".
Jaramillo también indicó que el rechazo del proyecto apunta a defender la salud de quienes habitan la comuna. "Tenemos derecho a vivir en un ambiente libre de contaminación. Me pregunto, si el proyecto es tan bueno, ¿por qué no lo instalan directamente en Temuco? Así el municipio ahorraría incluso en tiempo de traslado".
En este sentido, el gerente general de Gersa señaló que la elección de la comuna obedece a criterios de distancia considerados en la licitación. "El punto que elegimos cuenta con varias características que lo hacen asequible y adaptable a un proyecto similar al que tenemos en Santiago (...). Nuestro proyecto requiere de un terreno amplio", agregó.
Además, Quer fue enfático en aclarar que "lo más importante es que estamos cumpliendo con toda la normativa chilena ambiental, que no tiene nada que envidiar a la europea o a la americana. Tenemos autocontroles y controles externos (...) muy exigentes".