Lorenzo Lovera Seguel
Un cruel final tuvo Alberto Rebolledo Gutiérrez, de 37 años, al interior de su parcela del sector Liucura de la comuna de Lumaco, tras ser atacado por un grupo de tres encapuchados, quienes le quitaron la vida de un disparo de escopeta.
De acuerdo a antecedentes conocidos por este medio, el hecho habría ocurrido el viernes luego que la víctima realizara una venta de un vehículo, llegando a su domicilio con una considerable suma de dinero, dato que habría estado en conocimiento de los autores, quienes irrumpieron a la propiedad exigiéndole la entrega del botín.
En ese momento se habría sucedido un forcejeo que terminó cuando uno de los tres victimarios apuntó a Rebolledo Gutiérrez y segundos más tarde, jaló el gatillo a corta distancia, causándole una herida mortal en el tórax.
Tras ello, la esposa de la víctima se abalanzó contra uno de los asaltantes y le quitó su capucha, siendo aparentemente reconocido por la mujer, quien tras ser amenazada, fue amedrentada a refugiarse en una de las piezas del inmueble. Toda esa escena fue presenciada por el hijo de ambos, de 8 años de edad, quien se refugió abajo de una cama para no ser herido.
Pdi
Del caso fue informada la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones de Temuco, quienes se constituyeron en el sitio del suceso para iniciar las primeras diligencias.
Al respecto, el subprefecto de dicha unidad, Víctor Ruiz, confirmó que la investigación se realiza bajo la hipótesis de un robo con homicidio, la que se está llevando en conjunto con el Laboratorio de Criminalística de la Policía de Investigaciones.
El propio Ruiz confirmó que desde el sitio del suceso se levantó huella biológica la cual, es materia de análisis y se está a la espera de dichos resultados que puedan aportar antecedentes respecto de los autores del crimen.
Molestia
Total molestia existe al interior del municipio de Lumaco, luego de conocido el asesinato, esto tras estimar que el trabajo que efectúa personal de Carabineros en el lugar no se enfoca en resguardar la vida de las personas sino que más bien, el de las empresas forestales que allí operan.
Así lo piensa al menos su alcalde, Alejandro Fuentes, quien lanzó duras críticas al trabajo de la policía uniformada, justificándolas en que "es insólito que haya problemas sociales de seguridad en la zona y que ellos respondan que están solamente para proteger los pinos y no a las personas".
Fuentes hizo esa crítica en alusión a las medidas de protección que actualmente goza un predio de la Forestal Mininco en la zona, que cuenta con alrededor de 80 efectivos policiales para resguardar las maquinarias y pinos del sector.
Eso, según el edil, ha generado miedo e inseguridad en el resto de la población, sensación que se ha incrementado en el último tiempo "porque en la misma zona ha habido tres asaltos similares, con la diferencia que en esas ocasiones no hubo personas muertas. Entonces, no es primera vez que ocurre un asalto de esa envergadura protagonizado por gente encapuchada con vestimentas paramilitares".
"En la misma zona ha habido tres asaltos similares, con la diferencia que no hubo personas muertas".
Alejandro Fuentes, alcalde de Lumaco