Camilo Garrido
Un motín generado por los 22 internos que pernoctan en la habitación 2 del módulo 1 de la cárcel de Temuco terminó con un colchón incendiado, el que fue extinguido por los propios funcionarios de Gendarmería.
Así lo explicaron las autoridades locales luego de reaccionar ante el llamado de emergencia que Bomberos recibió a las 17:37 horas de ayer, en la que se informó de un siniestro en el lugar.
OPERATIVO
El aviso movilizó a 30 bomberos correspondientes a tres compañías de Bomberos, pero finalmente su acción no fue necesaria, ya que al momento de llegar los gendarmes ya habían extinguido el fuego, según lo relata el fiscal Roberto Garrido.
"Internos habrían encendido fuego en algunas de las colchonetas y posteriormente las habrían arrojado al techo", detalló el fiscal Garrido, agregando sobre el incendio que "no se extendió al resto del centro de detención, no hay personal lesionado, según lo que se me ha informado, ni Gendarmería ni tampoco los internos, y se han decretado las primeras diligencias, solicitando al Labocar que se constituya en el lugar para realizar algunos peritajes".
Respecto a los hechos, el coronel Luis López, director regional de Gendarmería, contó lo que ocurrió minutos antes del incidente. "Imputados reincidentes, en apoyo a otros imputados que en la tarde habían pasado a hacer de aislamiento producto de unos procedimientos de seguridad por tenencia de armamento y chicha, actuaron en rebeldía al régimen interno", indicó.
Si bien informaron que no hubo lesionados a raíz del fuego, indicaron que sí los hubo tras las medidas aplicadas para controlar el desorden.
"Hay una acción de controlar la situación que se estaba produciendo y en ese contexto se pueden producir evidentemente algunas lesiones, por lo que se dispuso también que se certificara el estado salud de todas las personas", dijo el fiscal Garrido.
Pese a una fumarola que se observó ascendiendo desde el interior de la cárcel, aseguran que el único daño ocurrió en el colchón y aseguraron que ninguna persona resultó lesionada por las llamas.
A raíz de la situación, personal de Carabineros cerró el cordón vial en las afueras de la cárcel, suspendiendo el tránsito en Avenida Balmaceda en ambos sentidos y las calles Miraflores, Las Heras y Lynch, lo que derivó en un alto nivel de congestión vehicular.
Pese a reiteradas aclaraciones de parte de Gendarmería y Carabineros, los familiares de los reos se mantenían con incertidumbre y nerviosismo en las afueras del penal, esperando que les detallaran el estado de salud de los reos. "Yo quiero saber cómo está mi hijo, eso no más. No me han dicho nada, ni una respuesta", expresó Marcela Romero.
En tanto, un interno de la cárcel que se contactó con El Austral, quien no quiso entregar su identidad, denunció que al interior de la cárcel viven una serie de vejámenes que quieren denunciar. Respecto al incendio, aseguró que "nosotros tenemos todo registrado, no abrían las puertas por el incendio para que los reos salieron, sólo tiraban agua por la reja, está grabado".
El coronel Luis López aseguró que realizarán un sumario interno "para determinar responsabilidades, dar cuenta a la justicia del hecho".