Conductores descuidados
Primero saludarles y agradecer el espacio. Si me permiten quiero referirme a una situación que se está haciendo muy común y preocupante. La tecnología en la medida que avanza, también queramos o no, nos obliga a hacer uso de ella o irremediablemente quedamos atrás. Sin embargo, se hace necesario ser prudentes y responsables con ello y me refiero con esto en especial a los señores conductores particulares y privados, pero especialmente a quienes son responsables de conducir micros o colectivos. Me transporto diariamente y no hay día en donde los conductores no tomen su equipo telefónico, chateen o hablen mientras conducen. (Tengo más de una prueba de ello ) Y si algún pasajero se atreve a amonestarlos, por muy amable que esto sea, contestan irrespetuosos o con indiferencia respecto de su falta, tanto así que alguien me dijo un día "no se preocupe, yo la pago si choco". Sin más comentario, sólo hacer un llamado a las autoridades que corresponda pues esto debe detenerse y se evitarían muchos de los accidentes que hay. Conducir con un teléfono en la mano, hablando o chateando, debería ser tan grave como conducir en estado de ebriedad.Esther Regollo
Pobre apoyo a deportistas
Sorprende la reacción de la prensa relacionado al bajo rendimiento de nuestros atletas. No van al fondo de ningún tema, siempre están en la crítica fácil. En Concepción nunca los he visto apoyando al atletismo para recuperar el Estadio Atlético, o la forma paupérrima que tuvieron que entrenar durante años. No tienen un lugar para reunirse, menos para entrenar permanentemente.
No tenemos un Centro de Alto Rendimiento, no existe una visión de futuro a partir de los colegios. Cero apoyo para traer profesores de nivel superior, también para financiar competencias internacionales. Motivo por el cual nuestros atletas tienen que irse a Santiago a corta edad, significa que deberán estar sin el apoyo constante de sus familias. Hoy con sus críticas fáciles, hacen más daño que aportar.
Héctor Péndola Torres
Concón y Placilla
Entre 7.000 y 10.000 se calculan los cadáveres que quedaron esparcidos en las batallas de Concón y Placilla de la revolución de 1891, donde se enfrentaron los mismos victoriosos de la Guerra del Pacífico. Fue una guerra civil entre congresistas y presidencialistas que no lograron llegar acuerdo en su interpretación de la Constitución de la República. En esa oportunidad las facciones políticas lograron dividir al Ejército y en menor porcentaje a la Armada, haciéndolos previamente participar en política como ministros de Estado igual que en otras oportunidades y previo al 11 de septiembre de 1973. En este agosto, el 21 y 28 se cumplen 125 años de estos infaustos hechos de guerra fratricida que tenemos la obligación de recordar para que no se repita lo de siempre de las guerras civiles: una vez que la política se torna irreconciliable, recurre a las FF.AA. para resolver el conflicto. Corolarios: La Constitución es un documento serio y los políticos deben respetar la misión de las FF.AA.Marcos Concha Valencia
La iglesia y los pokemones
Entre tantas malas noticias, que ocurren en el día a día, y me refiero al curita de nuestra ciudad que se hizo famoso cazando "pokemones", y que incluso lo leí en un diario de la capital, lo cual me causó mucho más asombro, ingeniosa manera de llamar a los niños a participar de esta gran iniciativa, que puedo decir con todas sus letras, que harto alejados están de la mano de Dios. Demás está decir lo chistoso que se ha vuelto esto, y si uno pregunta por alguien, te dicen, "no está, anda cazando pokemones" ahora mi pregunta es: ¿estará seguro este padrecito, que lo que ha cazado son realmente esos bicharracos?, porque de no ser así, que Diosito lo pille confesado.Sandra Fernández
Chihuailaf y el premio
En la edición del 24 de agosto de El Austral, el señor Chihuailaf afirma ante el periodista Héctor Ochoa que "uno no tiene que exagerar la humildad y creo que -objetivamente- mi obra ha sido acogida por gran parte de la sociedad chilena y sobre todo por los jóvenes y los niños".
La verdad es que el entrecomillado aserto parece tener más de deseo que de realidad. Porque sería mejor que el señor Chihuailaf exagerara la humildad y reconociera que ni gran parte de la sociedad chilena ni sobre todo los jóvenes y los niños conocen su obra. Cosa distinta es que su prestigio de poeta esté presente en las tierras de La Araucanía, lo que responde a que aquí se ha exacerbado el llamado Conflicto Mapuche. No obstante, hubiera sido deseable que se le otorgara el Premio Nacional de Literatura 2016, porque nada habría costado satisfacer las palmarias ansias de figuración del señor Chihuailaf. ¿Qué habría costado hacer feliz a quien tiene el mérito cierto de haber sabido escalar?
Aníbal Barrera, periodista