Necesita beca para su hija
Por intermedio de su prestigioso medio quiero dar a conocer lo siguiente: esto se remonta desde el año 2013 cuando quedé cesante, desde esa fecha que vengo postulando a una beca, pero ha sido un doloroso y rotundo fracaso, esto me ha llevado a endeudarme en casas comerciales y bancos, a tal extremo que ya estoy en Dicom, y no hay dónde pueda salvar la situación para mi hija.
Por lo consiguiente le hago un llamado a Junaeb y a su directora Carola Rodríguez si pudieran dar una solución a mi caso, pues mi salud me empezó a fallar a mis 63 años, para peor de los males. Mi contacto es 56360417. Esperanzado una solución y respuesta.
Adolfo Cuevas
Palomas sin partido
Llama la atención que en ninguna pancarta, palomita, cartel o cartelito promocionando a los diversos candidatos a alcalde, aparezca claramente a qué partido político pertenecen, como solía ser antaño. Mi pregunta es ¿Temen los candidatos ser relacionados con alguna colectividad política, algún partido político se avergüenza del candidato que lo representa o, sencillamente a nadie le interesa que el electorado tenga la película demasiado clara?
Renato Prassel Strelow
Campaña contra el bullying
En relación a reportajes sobre el bullying escolar año 2016, considero que es una situación que afecta muy fuertemente la autoestima, el aprendizaje y el desarrollo general de niños, niñas, adolescentes y al núcleo familiar. Es por eso que solicito a usted, respetuosamente, considerar la iniciativa de una campaña, alianza de todos los establecimientos de educación básica de la Novena Región, con el propósito de aportar a la prevención de esta amenaza a nuestra integridad.Escarlet Elgueta
La pobreza
La pobreza es relativa, porque es un sentimiento humano que nace por comparación de bienes entre personas; Eva y Adán se sintieron pobres aún en el Paraíso y pecaron por tratar de igualarse a Dios en sabiduría. Se han inventado varas de comparación, cada vez más amplias para incluir más gente que se considere pobre y sean pasto de populistas en busca del poder, que les ofrecerán sacarlos de ese estado de oprobio, pero que finalmente se harán ellos más ricos y los que dicen defender serán más pobres. De la pobreza o de considerarse pobre no se sale de un día para otro por obra de populismos, o por las cifras anuales de encuestas basadas en varas hechas a medida para entusiasmar en épocas electorales. La verdad es que Chile tiene menos pobres por el esfuerzo constante y mancomunado de sus ciudadanos que con su trabajo han logrado una vida mejor educando a sus hijos y guiándolos en una senda de prosperidad. La pobreza o riqueza depende del propio punto de vista y no de otros intereses.
Marcos Concha Valencia
Libro de sexualidad
Respecto a la distribución del libro sobre sexualidad por parte del Municipio de Santiago, tanto quienes están a favor como quienes están en contra han olvidado algo fundamental, el derecho y deber de los padres de educar a sus hijos, que en terminología estricta es una libertad, la libertad de educar a los hijos.
Este Derecho (que a la vez es un deber) es fundamental en un Estado de Derecho Democrático, ya que es la única manera de garantizar desde el origen mismo otra serie de libertades civiles, como la libertad de conciencia, la libertad religiosa, la libertad de enseñanza y la libertad de expresión. Al imponerse por parte del Estado, en este caso un Municipio, una forma de ver la sexualidad, tan válida como otras basadas en diferentes valores, se pasa a llevar a quienes tienen la primera palabra en esta materia, que son los padres, y se condiciona las conciencias de los niños como los burócratas de turno creen que es correcto.
Alguien podría decir que bastaría con que un padre manifestara su rechazo para que su hijo no reciba el libro, pero eso es distorsionar el ejercicio del derecho en comento, ya que comienza por una actuación del Estado, lo que no es propio de las libertades civiles, que se definen justamente por la ausencia de actuación del Estado. Se parte completamente al revés y se exige al ciudadano que realice una actuación para que se respete su ámbito de libertad; es tan grave como si tuviéramos que pedir permiso para salir de nuestras casas, tan grave como un toque de queda, en este caso un toque de queda valórico.
Si los editores del libro quieren distribuirlo, están en todo su derecho, y si los padres quieren adquirirlo también están en todo su derecho; lo que no puede ser aceptado es que se imponga por parte del Estado una visión y se relegue a un segundo plano el papel de los padres en la educación de sus hijos.
José Carlos Meza Pereira, analista Círculo Acton Chile