Luis

Nitrihual,

Facultad

Humanidades de la Ufro

Los resultados del domingo eran del todo previsible. Hay muy poco que no pudiera preverse. Lo primero es considerar que la Nueva Mayoría y Chile Vamos se repartieron la torta electoral, 37% y 38% respectivamente. No hay carrera ganada para los presidenciales. Los análisis indicaban que podíamos estar en presencia de una ruptura del bipartidismo, pero más bien se observa una composición inestable del bloque histórico.

Eso es claro. Un caso interesante, pero golondrina no hace primavera (aunque podría anticiparla en el mediano plazo) es el de Jorge Sharp en Valparaíso. Muchos de los/as debutantes no pudieron romper la hegemonía ya sea de la derecha o de la coalición de centro-derecha que es hoy la Nueva Mayoría.

Un segundo elemento interesante y el cual es una hipótesis que me gustaría esbozar aquí con ustedes es que cuando la derecha y la centro derecha (Nueva Mayoría) se hacen indistinguibles, es decir, cuando existen los mismos problemas de sinvergüenza política y económica, la que gana es la derecha. La razón puede ser simple y compleja a la vez. Si los que dicen que te defienden son iguales a los que te pagan poco, son dueños de medio Chile, sabes que te roban, etc., entonces mejor me quedo con ellos pues tienen el dinero y dan trabajo. Es una ecuación sencilla y que deberían considerar quienes aspiran a ser alternativa desde la izquierda. No puede existir un SQM en la izquierda pues la gente es severa con esto. Es soportable en la derecha, de allí el triunfo de la UDI, pero el votante de derecha es más fiel y es capaz de tragarse su propia suciedad y reír de buena gana.

Pero el análisis no está completo sin mirar bien el 65% de abstención. Este porcentaje se puede comprender muy bien desde la poca importancia que le entrega la gente a las elecciones. Si al final todo/as son iguales, ¿para qué tomarme la molestia de ir a votar? Cuando la clase política deviene en oligarquía política entonces la democracia se vuelve un juego de apariencias.

Andrea Arias Vega

A la hora de registrar los votos emitidos por comuna en la Región, Los Sauces, en Malleco, lidera el ranking de participación electoral con 4.715 votos, lo que corresponde a un 64% de su padrón electoral.

Le sigue a Los Sauces en este ranking de responsabilidad cívica, Cholchol (60,8%), Lumaco (58,7%), Teodoro Schmidt (56,6%) y Renaico (56,4%).

Hay que consignar que en el espectro regional, el porcentaje de participación en las municipales sólo llegó a un 38,6% y que la comuna de Los Sauces , la que tiene un padrón electoral de 7.367 votantes, así como las otras que lideran este ranking (a excepción de Teodoro Schmidt), poseen una población inferior a las diez mil personas.

En este sentido, pese a la alta abstención regional, es posible vincular la mayor participación electoral de una comuna con territorios pequeños, con una menor población y donde la alta ruralidad y el componente mapuche se cruzan.

Al respecto, el alcalde de Los Sauces, Gastón Mella (UDI), quien salió reelecto, corroboró que en su comuna existe un 18% de población compuesta por adultos mayores y son ellos, según explica, quienes salieron el domingo en masa a votar.

"Yo vivo en Los Sauces y la gente aquí tiene muy marcado la votación, sobre todo, los adultos mayores que son los que votan en mayoría. Yo trabajo mucho con ellos y yo creo que gracias a ellos tenemos este porcentaje de alta participación. Yo, personalmente, recorrí cada una de sus casas pidiendo que fueran a votar", comentó Mella.

Abstención

Como contrapunto, la comuna que marcó una mayor abstención es la capital de La Araucanía con un 73,4%, llegando su participación a sólo un 26.6%, lo que significa que de los 225 mil habilitados en Temuco: dos de cada diez efectuaron su derecho a sufragio.

Acompañan a Temuco en este ranking de abstención: Padre Las Casas (70,2%), Villarrica (67,6%), Curacautín (67,2), Pucón (62,9%), y Lautaro (62,1%).

En este caso, las comunas con mayor abstención poseen una población mayor y son consideradas grandes urbes. Ambas capitales de provincia acumulan esta alta abstención, ya que en Angol llega al 60,2%.

Nueva era

El alcalde de Padres Las Casas, Juan Eduardo Delgado (RN), comuna que goza de un 70% de abstención, señaló que "hay que cuestionarse qué es lo que está pasando, yo creo que esto tiene más que ver con lo que sucede a nivel nacional y no tanto con los gobiernos locales".

Añadió que en su opinión "son los partidos políticos los que no tienen credibilidad en este minuto, lo que me duele. Sin embargo, lo que está pasando también podría ser el inicio de una nueva era donde lo que importe sean las personas", planteó el jefe comunal de Padre Las Casas.

es el porcentaje de 38,6%