Recientemente me tocó participar de una intervención en una plaza de Adams Morgan, conocido sector de Washington DC. La organización que estuvo a cargo de la actividad fue una ONG Chilena, Ciudad Emergente, que a través de una arquitectura táctica y herramientas para el urbanismo ciudadano busca mejorar la calidad de vida en ciudades y barrios en desarrollo. El cliente de este proyecto fue la oficina de Planificación de la Municipal de DC, la cual busca a través de este tipo de actividades integrar más a sus vecinos y recibir feedback de cómo hacer de los espacios públicos lugares más atractivos para encontrarse y compartir como barrio.
En esta misma línea destacó el seminario Demand Solutions que organiza el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), evento al que tuve la oportunidad de asistir y que busca congregar las mejores ideas y proyectos que puedan mejorar las vida de las personas. Una de sus charlas fue la del chileno Sebastián Errazuriz, quien expuso sobre los desafíos del arte fuera de los museos haciendo de las calles espacios más creativos.
Ambas instancias fortalecieron mi idea sobre lo clave que son los espacios, lugares y personas que nos rodean. Una plaza atractiva, luminosa y segura puede atraer a los vecinos creando muchos espacios de rica vida de barrio, elementos de arte en las calles pueden gatillar una gran innovación junto con embellecer y alegrar nuestros espacios y lugares de transito. Esto es fundamental en mi opinión con quien me relaciono durante mi día a día. Desde quienes son mis vecinos a que personas son las que me acompañan para un buen café conversado, con quién integro equipos que conllevan atractivos y desafiantes proyectos, quiénes son mis amigos, etc.
Nuestras municipalidades sin duda tienen una gran labor en hacer nuestros espacios públicos más atractivos y seguros, y los artistas con empresas en sacar el arte a la vida diaria y cotidiana, sin embargo, nosotros tenemos una gran y fundamental labor: ser parte activa de esta construcción, abriendo bien los ojos para ver lo que está a nuestro alrededor y aprender a seleccionar bien las personas con quienes me rodeo.
Ciudades y barrios mas amigables son una tarea de todos.
Felipe Magofke, magíster en Desarrollo Internacional Duke University (about.me/fmagofke)