Enrique Cavalieri es el nombre del propietario y representante legal de Transportes Cavalieri, empresa cuya base de operaciones ubicada en Pillanlelbún fue víctima del ataque incendiario más grande del último tiempo, con un total de 17 camiones quemados que suman más de $2 mil millones en pérdidas, según cálculos preliminares.
En el mismo lugar del atentado, a la altura del kilómetro 659 de la Ruta 5 Sur, Cavalieri se reunió a primera hora de ayer con los trabajadores de su empresa para reafirmar que son "una empresa que nació, creció y seguirá en esta zona".
"Hemos tenido una reunión para mostrar el apoyo a nuestra gente, que es lo más importante. El sindicado de camioneros (de la empresa) nos ha brindado un gran apoyo. Estuvimos con las personas que quedaron sin sus vehículos para ver cómo vamos a ayudar para que tengan sus vacaciones y poder hacer una continuidad para que ninguna persona que trabaja con nosotros, tenga que sufrir", relató Cavalieri a El Austral.
"La idea es que nadie quede cesante. Estamos viendo cómo podemos solucionar el problema para que nadie quede cesante. Eso es lo más importante para nosotros y que lo entienda la gente que hace mal las cosas: dañan a toda la gente trabajadora, familiares, hijos... hay tanta gente detrás. Eso no está bien, detrás de cada camión hay familia", manifestó el empresario.
Sobre el atentado
De bajo perfil y cuidadoso en sus palabras, Cavalieri es cauto incluso al ser consultado sobre la cifra en la que se estiman las pérdidas que afectaron a su empresa. "Las pérdidas son grandes, pero todavía no sabemos cuánto es", dijo.
De la misma forma, no habló de terrorismo y respondió a aquellos que han sospechado que el ataque se trata de un autoatentado.
"Lamentamos lo que ha pasado. Es segunda vez que nos pasa. No podemos culpar a nadie porque no sabemos, en realidad. La Región es muy grande y gente mala hay en todos los lugares. Hemos escuchado a algunas personas que dicen que puede ser un autoatentado y eso jamás. No es la idea. Hay camiones que se están pagando, no son camiones viejos y por lo tanto, por ninguna parte es un autoatentado", expresó.
"La Fiscalía y los Tribunales tendrán que determinar qué es lo que pasó. Son actos malos que suceden. Hoy, lo que queríamos era dar tranquilidad a nuestra gente, que es lo más importante", afirmó Enrique Cavalieri.
El empresario precisó que son 17 camiones los quemados y que el domingo se informó que eran 19 porque en el recinto aún había dos camiones del atentado sufrido en 2015.
Medidas
El empresario reconoció que algunos servicios que prestan como empresa de transportes podrían verse complicados al contar con menos máquinas en la flota.
"Nuestra empresa presta servicios a CCU, a Walmart y a otras empresas. Los que estamos sufriendo esto somos nosotros, personas de trabajo instaladas en la Región desde hace 20 años. Somos directamente de aquí y no tenemos nada que ver con otra empresa de otra zona. El daño es directamente a nosotros y nos trae muchas complicaciones, tanto con CCU y con los otros proveedores que tenemos", explicó el transportista.
Sobre una eventual querella por la situación, Cavalieri se limitó a señalar que los abogados de su empresa tomarán las acciones que estimen pertinentes.
"Nuestros abogados verán qué tienen que hacer. Tal como el año pasado se presentó una querella contra los que resulten responsables, pienso que esta vez va a ser lo mismo lo que decidirá nuestro abogado", agregó.
Sin responder preguntas sobre la responsabilidad del Gobierno, Enrique Cavalieri dijo que "lo más importante es que el trabajo va a seguir igual con los trabajadores que hoy (ayer) nos dieron fuerza para salir adelante".
"La idea es que nadie quede cesante"
"Uno se encariña con los fierros y termina queriendo a su camión. Por eso da pena que pase esto".
Carlos Ribet,, camionero afectado"
millones de pesos sería la estimación preliminar de la pérdida total en la empresa Transportes Cavalieri. $2 mil