Juan Carlos Poblete G.
El joven de 27 años que en enero fue condenado en calidad de autor de cuatro incendios, y que en la tarde de este martes fue detenido como principal sospechoso de quemar la casa de un amigo de su expolola, fue uno de los testigos clave en el juicio contra un exbombero que en 2012 fue condenado por incendiar el liceo C-14, en la comuna de Lonquimay.
Se trata de Felipe Arturo Beroíza Yáñez (27), quien actualmente está detenido por su presunta responsabilidad en un incendio ocurrido en calle Ignacio Carrera Pinto, en Lonquimay, en la madrugada del lunes 1 de mayo. De acuerdo a la información proporcionada por la Fiscalía, este último incendio afectó la vivienda de la madre de un amigo de su expolola, por lo que estaría vinculado a los cuatro incendios que provocó entre el 10 de marzo y el 10 de abril del año pasado, en la misma comuna, en domicilios relacionados a su expareja.
Sin embargo, los cuatro incendios ocurridos en 2016 y el último, del lunes pasado, no son los únicos por los que el nombre de Beroíza ha sido mencionado en un tribunal, puesto que en el año 2012 declaró como testigo en el juicio contra Patricio Alejandro Garrido Garrido, el bombero que fue condenado a siete años de cárcel efectiva tras ser acusado de incendiar el liceo de la comuna cordillerana. A cuatro años de aquello, el joven insiste en que es inocente.
El liceo quemado
El 17 de febrero de 2012 un incendio destruyó por completo el Liceo C-14, de la comuna de Lonquimay. La estructura en la que se educaban 475 alumnos fue destruida por un incendio intencional que, de acuerdo a la investigación de la Fiscalía, fue causado por Patricio Garrido Garrido, quien en la madrugada de ese día estaba compartiendo con Felipe Beroíza Yáñez, según consta en las declaraciones de ambos ante el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco.
En esa oportunidad Beroíza declara que "el 17 de febrero de 2012 estaba en compañía de Patricio Garrido compartiendo bebidas alcohólicas en un restaurante, estaban ebrios, caminaron, al llegar a una esquina Patricio le dijo "¿vamos a quemar la Copec?", pero Beroíza afirma que rechazó la propuesta y lo recriminó.
Beroíza afirma en el juicio que "caminaban por el exterior del liceo cuando Patricio saltó la reja que protegía dicho inmueble hacia el interior, él hizo lo mismo, se fuman un cigarrillo, allí su amigo Patricio con un encendedor intenta encender un papel fieltro adosado a una parte del inmueble del colegio que estaba siendo objeto de reparación, lo recriminó por esa acción con voz alta lo que alertó a los perros del cuidador del recinto estadio, aledaño al colegio, por esa razón salió corriendo mientras su amigo permaneció en el interior. Luego, miró hacia atrás visualizando ahora que surgía una llama de dicho lugar, entonces se aleja del sector mientras su amigo arrancó en dirección a su casa".
La declaración de Beroíza, -que según la defensa de Garrido Garrido debía ser "desestimada" ya que tenía "contradicciones"- fue considerada por el tribunal, que finalmente en febrero de 2013 condenó a Patricio Garrido Garrido a siete años de cárcel efectiva, en calidad de autor del incendio del liceo. Sin embargo, en octubre de 2016 se le otorgó el beneficio de libertad condicional por buena conducta.
"El tribunal tomó la declaración de Felipe Beroíza como testigo presencial y en realidad él solo dice que el fuego empezó en un lugar distinto al que situó el peritaje del DET (Departamento de Estudios Técnicos) de Bomberos de Temuco", dijo Garrido a El Austral.
En tanto, el fiscal vocero de la Fiscalía, Roberto Garrido, confirmó que Beroíza declaró en el juicio del año 2012, precisando que "entregó antecedentes respecto de la participación de la persona que resultó condenada (Patricio Garrido)" y que durante la investigación "no existieron testimonios ni peritajes ni declaraciones que lo vincularan (a Beroíza) a la participación o comisión del delito" de incendio en el establecimiento educacional.
El último incendio
Vecinos de Lonquimay, en conversación con El Austral, relataron que Beroíza Yáñez era bombero -de la misma compañía que Garrido- y trabajaba en una ferretería de la comuna. Por su participación en los cuatro incendios en 2016, fue condenado a cinco años de libertad vigilada.
"(En Beroíza) hay un patrón de conducta que lo llevaba a destruir lo relacionado con su expareja".
Iván Isla,, fiscal de Curacautín"