El Austral
A través de una carta recibida por el superintendente del Cuerpo de Bomberos de Temuco, Leonel Nualart, una niña de 12 años de edad le pidió conocer al bombero que hace dos meses le salvó la vida tras un grave accidente ocurrido en el sector Amanecer.
La idea nació espontáneamente de Fernanda Rayén Arias Guerra, una niña que el pasado 30 de marzo, el mismo día de su cumpleaños, fue atropellada por un taxi en calle Milano esquina Da Vinci, cuando bajaba de un microbús. El golpe la lanzó a unos 15 metros de distancia, dejándola con graves heridas. La niña perdió el conocimiento, mientras sangraba profusamente de distintas partes del cuerpo.
RESCATE
Es allí cuando aparece en acción el bombero Robinson Jara, de la Cuarta Compañía, quien se encontraba cerca del accidente. Junto a un pequeño bolso con material de primeros auxilios que siempre lleva consigo, corrió hasta el sitio del accidente. "Tenía aparente fractura de cadera y del brazo izquierdo, estaba sumamente complicada, inconsciente, solamente respondía a estímulos dolorosos y por eso llamé de inmediato al Samu", recordó.
El voluntario le brindó las primeras atenciones con el equipo que llevaba, a la espera de la ambulancia que finalmente se la llevó hasta el Hospital Hernán Henríquez.
Los deseos de la joven niña de conocer a su salvador se concretaron finalmente en el Cuartel General del Cuerpo de Bomberos, hasta donde llegó Fernanda junto a su familia para reencontrarse con el bombero Jara.
La madre de la niña, Angélica Guerra, recordó así los duros momentos que siguieron tras el accidente: "Mi hija llegó directo a reanimación al hospital, iba inconsciente, intubada, no daba señales de vida, tenía el fémur roto, daños en los pulmones y no respondía".
Fernanda estuvo siete días inconsciente UCI del hospital, conectada a un respirador artificial y otros siete días en la UTI. "Quedó con algunos daños neurológicos, con una parálisis en el lado izquierdo y tuvo que aprender a escribir, a comer de nuevo y a mover sus piernas", aseveró su madre, agregando que "un día, mi hija me dice que quería conocer al bombero que la salvó, para darle las gracias y por eso vinimos a ubicarlo".
Rescatado
En el reencuentro, el bombero Jara le reveló a la niña una increíble coincidencia que hace aún más emotiva la historia de su rescate. El voluntario contó que a los 16 años, cuando se dirigía a su liceo, él también fue rescatado por un bomberos tras sufrir un grave accidente.
"En ese momento llegó un bombero que también era paramédico como yo y me salvó la vida. De no mediar las ayudas necesarias, habría perdido la vida. También estuve 21 días muy grave en el hospital. Viví casi la misma historia de Fernanda", dijo el bombero, ante la sorprendida familia de la menor. Jara relató que el accidente cambió su vida por completo convirtiéndose en bombero con la finalidad de ayudar al prójimo, tal como aquel voluntario lo ayudó cuando él lo necesitó.
Reconocimiento
El alto mando de Bomberos destacó la intervención del voluntario en el accidente, como también su actitud de humildad y de no buscar reconocimiento alguno, retirándose en silencio luego de ayudar en el accidente. "Esa es la verdadera labor del bombero, ser humilde, no autoproclamarse un héroe, ni alardear de su valentía o heroísmo. Así ocurrió en este caso", dijo el superintendente Nualart, anunciando que el próximo Día Nacional del Bombero se aprovechará la ceremonia para entregar un reconocimiento público al voluntario.