Frases
"Es impresentable. Demuestra una ignorancia tremenda".
Jorge Pinto, — Premio Nacional de Historia y los
— dichos de Ossandón"Hasta el momento estamos requiriendo los informes tanto de Bomberos como de la PDI".
Cristian Crisosto, — fiscal
"Es impresentable. Demuestra una ignorancia tremenda".
Jorge Pinto, — Premio Nacional de Historia y los
— dichos de Ossandón"Hasta el momento estamos requiriendo los informes tanto de Bomberos como de la PDI".
Cristian Crisosto, — fiscal
Efectivos del Regimiento Tucapel de Temuco desarrollarán un operativo en Escuela 68 de Padre Las Casas, como una forma de iniciar las actividades del aniversario del "Día de la Infantería". Los funcionarios se trasladarán hasta el establecimiento educacional para desarrollar reparaciones de las instalaciones y una revisión sanitaria.
Nuevamente el temor sacudió a los habitantes de la comuna de Melipeuco que residen en las inmediaciones del volcán Llaima, luego que en las primeras horas de ayer el macizo lanzó una gran fumarola de humo negro que se podía ver desde varios metros a la redonda. Se decretó alerta temprana preventiva.
Aunque hablar de desarrollo económico en la Región implica pensar en el ámbito silvoagropecuario o en el turismo, lo cierto es que la capital regional se está convirtiendo en un polo digital a nivel nacional e incluso internacional, gracias a la industria del software que actualmente desarrollan 300 profesionales locales desde Everis.
Hemos crecido -y ahí está en realidad el problema- oyendo por todos lados en esta maravillosa Novena Región que o «tú eres huinca» o «yo soy mapuche», o, peor aún, que «tú vienes de afuera» o «esta tierra me pertenece». Para qué hablar de las palabras y acciones que aquí y allá han discriminado por décadas a quienes vemos o somos vistos como distintos o, incluso, como enemigos.
El punto es que esto va precisamente a contrapelo de lo que indica el último estudio sobre interculturalidad del Centro de Estudios Interculturales e Indígenas (CEII) de la Universidad Católica, donde se establece que más del 70% de los encuestados del centro y sur del país, además de rechazar los actos de violencia rural, se considera, en general, derechamente mestizo. En dos palabras: la gran mayoría se reconoce simplemente como chilena.
De una vez por todas, y hoy más que nunca, debemos como sociedad ponernos de acuerdo y aceptar, sacándonos todos los prejuicios y complejos que podamos tener, que somos nada más y nada menos que mestizos.
Un mestizaje que ha heredado lo mejor de nuestros antepasados y que necesita extirpar desde dentro cualquier discurso separatista que trate de imponer una supuesta pureza o supremacía racial y un presunto dominio territorial -la nueva Frontera que algunos quisieran instalar- de una población sobre otra, en una Región con orígenes étnicos de la mayor diversidad.
Saquémonos de encima esas verdades a medias que hablan de una supuesta «deuda» de un pueblo respecto de otro. Lo único que ganamos así es tener un caldo de cultivo para odios, recelos y venganzas, y caramba que han contribuido a eso los discursos indigenistas y los famosos Altos Comisionados, que pontifican desde miles de kilómetros de distancia.
Ni qué hablar de la clase política, especialmente el gobierno, que hace como aquí no ocurre nada, pero sin embargo, no es siquiera capaz de poner los pies -palabra comprometida de por medio- en las casas de aquellas familias que han vivido en carne propia una y otra vez las amenazas y el terror. Porque, claro, a un «enemigo histórico» se le puede hacer de todo: odiar, atacar y robar. Cualquier cosa queda justificada y amparada. Y de ahí a la violencia terrorista hay un solo paso, el que se da justamente cuando hay silencio, complicidad, ignorancia y temor. Al menos así lo veo yo, Marcelo Zirotti, chileno y mestizo.
Marcelo Zirotti Kehr, presidente Sociedad de Fomento Agrícola de Temuco, Sofo A.G.
Los intensos trabajos que por estos días se desarrollan en algunas de las principales calles del centro de Temuco, y que son parte del proyecto que busca generar vías exclusivas para la circulación de la locomoción colectiva, con la finalidad de mejorar el transporte público en la capital regional, acarrean una serie de inconvenientes para quienes trabajan o bien circulan por los tramos en reparación.
Comerciantes que deben enfrentar una disminución de su clientela e intensos ruidos, peatones que ven mermado el espacio para desplazarse y automovilistas que deben optar por vías alternativas y enfrentar habituales tacos, son sólo las muestras más visibles de este problema al que se agrega la misma locomoción colectiva, que por estos días ve alterados sus recorridos habituales en su paso por el centro de la ciudad.
Sin embargo, se trata de obras temporales que avanzan raudamente para generar mejores condiciones de circulación en el centro de Temuco, beneficiando no sólo a quienes usan el transporte público, sino en general a toda una ciudadanía que quiere una mejor calidad de vida.
Es por ello que se hace necesario que todos quienes sufren con estos inconvenientes aporten a generar -por estos días- un ambiente más sano, toda vez que impera una suerte de individualismo donde se privilegia el beneficio propio por sobre el colectivo.
Frecuentes y constantes bocinazos, vehículos detenidos en lugares no aptos para ello y que sólo generan tacos, automovilistas que no respetan pasos peatonales, o bien ciudadanos de a pie que cruzan en lugares no habilitados, y que no hacen más que generar un ambiente aún más tenso, que además aumenta el riesgo de accidentes.
Acciones que propendan al bien colectivo son necesarias. Por ello, no sólo debe imperar el respeto irrestricto por las normas del tránsito, sino también mucho sentido común para hacer del centro de la ciudad un lugar más amigable.