Camilo Garrido
Afirmar que el temuquense Jorge Young Valenzuela ha dedicado su vida entera a luchar por su salud no es una exageración. Este hombre de 60 años comenzó a sus 19 a realizarse diálisis día por medio, cinco horas y media por vez. Esta lamentable realidad motiva a este emprendedor a querer alcanzar el récord Guinness del dializado más longevo del mundo.
"Yo llevó en diálisis más de 40 años. Para ser más exacto, 40 años y cuatro meses. Comencé un día 8 de marzo de 1977", cuenta el dueño de una pequeña empresa de estructuras metálicas, fábrica que también se ubica en su propiedad de calle León Gallo de Temuco.
Los problemas
Al conocer a Young, es fácil comprender que la resiliencia ha sido la médula espinal de su propia historia: lo que comenzó como una disfunción de sus riñones en su infancia se volvió una condena hasta el día de hoy.
"Como a los 7 años me dio una insuficiencia renal aguda que se transformó en crónica y a los 19 años me tuve que dializar. Me trasplantaron el año 85, el riñón lo metieron, pero tuvieron que sacarlo porque no trabajaba", indicó.
En su caso particular, esta enfermedad lo mantiene en un estado aún más especial, ya que normalmente una persona se dializa entre 5 y 6 veces por dos semanas. Él lo hace sagradamente día por medio.
Junto con esto, la presencia de aluminio en los primeros procesos de diálisis terminó por afectar a sus huesos y también su movilidad. En consecuencia de esto, el Young pasa la mayor parte del tiempo sentado. Si no es trabajando frente a su computador, lo es arrimado a su silla motorizada que le permite desplazarse no solamente en la calle, sino que también al interior de su casa.
A esto se suma que hace un mes y medio perdió a su mejor enfermera: su esposa Laura Conejeros Valenzuela. "Con mi señora estuvimos casados más de 30 años, ella era el pilar fuerte en esto porque me ayudaba a preparar la máquina", recuerda con nostalgia el hombre, quien reconoce que está volviendo a aprender los trámites que ella le ayudaba a realizar pero que debe trabajar para obtener los recursos que necesita para costear su salud.
Equipos nuevos
Para Jorge Young bastaron menos de cinco diálisis para comprender que su vida dependía de una dialización más frecuente y extensa que las regulares. Por eso, con la ayuda de créditos blandos ofrecidos por empresas de salud y la ayuda monetaria propia, la de sus amigos y de sus hermanos, instaló un centro de diálisis en su hogar, uno de los inmuebles más antiguos de Temuco, el que conserva desde que su abuelo falleció.
"Hoy los centros de diálisis no me pueden hacer la diálisis que necesito. En uno dializan sólo cuatro horas y tres veces por semana, por un tema de cupos y de costo-beneficio también", asegura este dueño de casa.
Sin embargo, su equipo, una dializadora de marca Fresenius y modelo 4008E está obsoleto, ya se está deteriorando y, con ello, también su propio cuerpo. Las afecciones comenzaron en sus costillas, se extendieron hasta los huesos de sus pies y actualmente tiene una compresión lumbar, todo producto del exceso de diálisis, acomodado a la tecnología disponible a la fecha del mismo aparato.
"Se me han trancado todas las articulaciones, me han operado cuatro veces. En este momento para mí es ultra necesario cambiar a una nueva tecnología. La última cotización que me dieron fue de $16 millones 480 mil más IVA. Una planta de agua (una de las partes importantes de la máquina) está alrededor de los $8 millones para ese modelo", sostiene el comerciante.
Jorge Young habla en serio cuando dice que quiere postular a ser récord Guinness como el dializado más antiguo del mundo. Incluso, tiene contadas sus diálisis. Desde el 8 de marzo de 1977 hasta la fecha, ya cuenta con más de 14.743 días en diálisis periódica.
"Este año se mandaron los últimos papeles (...) Me lo tramitó una de las personas que me ayudan a ver mi problema. Con una nieta de ella hicieron la postulación", indicó. Ahora está esperando que desde la organización que registra las marcas mundiales emitan su veredicto respecto al caso.
Por lo pronto, Young necesita de los recursos para financiar el equipo que requiere, para lo cual opta por una consideración del Gobierno. "Gasto la mitad de lo que cuesta un centro convencional, porque yo no tengo fines de lucro, no tengo enfermera. Siempre me he dializado en casa y gracias a eso tengo 40 y tantos años de vida en diálisis", destaca.
Actualmente, el récord lo sustenta Muris Mujicic, oriundo de Croacia, quien registró 41 años y 112 días de diálisis periódica registrado desde el 15 de mayo de 1974 hasta el 4 de septiembre de 2015.
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"La máquina (que tengo) era reacondicionada del 2001. Costó $4.500.000. Hemos tenido que hacer inventos para hacerla funcionar. Hoy la máquina que necesito es de mejor tecnología que ésta, se trata de ir mejorando la calidad de diálisis".
Jorge Young Valenzuela,
paciente de diálisis"