Rodrigo Zamorano C.
Hace 26 años que la empresa de Rolando Iturra, padre del reconocido futbolista Manuel "Colocho" Iturra, se encuentra a un costado de su hogar, en el sector del camino a Labranza, en el kilómetro 7,5.
Si bien reconoce que una o dos veces al año sufren delitos de robos menores, lo que han vivido junto a su esposa esta última semana escapa a todo pronóstico.
El empresario aseguró haber sido víctima de cuatro robos en el último mes, siendo tres de ellos en esta semana que recién termina.
"Entran con carretillas por una de los pasajes que están aledaños a este recinto", explica su pareja, Yanina Sandoval.
Aún afectada por los constantes asaltos que han sido víctima, la mujer recorrió todos los lugares donde los delincuentes actúan en la impunidad de la noche al interior de la empresa constructora Rolando Iturra.
"Ya no sabemos qué hacer. Entraron a robar la madrugada del martes 8, después en pleno temporal ingresaron con carretillas y volvieron a entrar el domingo 14 de agosto", cuenta Yanina.
Los robos, precisa la mujer, al parecer tendrían características de ser dateados "porque se llevan las cosas más caras, como cocinas a leña, moto bombas y generadores que tenemos guardados en una bodega", dice.
Pese a que existen cámaras de seguridad, los delincuentes hallaron el modo de obstaculizar su visibilidad por lo que no hay registro del accionar de los hampones.
"Por aquí es donde se movilizan, todavía están algunas huellas que dejaron las carretillas donde cargan las cosas robadas", cuenta la pareja de Rolando Iturra, dueño de casa y de la empresa que está ubicada en el mismo terreno.
ARMADOS
Al interior de su domicilio, ubicado a un costado de la instalaciones, la pareja de empresarios relata que hace dos noches que no duermen con tranquilidad por el temor que nuevamente los delincuentes ingresen a robar parte de los elementos de trabajo y herramientas que son propiedad del negocio familiar.
Según cuentan, las pérdidas superan los $ 10 millones de pesos.
"Como vivimos los dos solos, tenemos miedo. De hecho mi marido anoche durmió en la bodega, armado. A mí me da mucho miedo porque esto puede llegar a algo más grave. O cae él o un delincuente", señaló Yanina.
Por lo mismo, la pareja ha denunciado los cuatro robos que ha sufrido, sin embargo, aún no han tenido respuesta para dar con los responsables.
"La policía vino, tomó algunas fotos, tomó nuestros datos y todo quedó en eso", sostuvo la mujer, quien indicó que tras los asaltos han debido cambiar todas las cerraduras y accesos al lugar.
"Ahora estamos desesperados, porque antes, claro, nos habían entrado a robar, pero nunca había sido tan intenso como en los últimos días", dijo la afectada.
Entre otras medidas desesperadas que han tomado está la publicación en las redes sociales de los equipos y herramientas que han sido robadas desde la empresa.
"Después de la publicación he recibido varios mensajes privados donde me dan algunas pistas los vecinos. Ellos me dicen que en las noches han visto unas camionetas sospechosas justo por el lado, en el pasaje que es por donde creemos que estos tipos ingresan", dice Yanina, esperando que los hechos delictuales no se repitan y así poder volver a retomar su rutina habitual.
