El Austral
Un voraz incendio consumió -pasadas las 5 de la mañana de ayer- las salas de clases, el comedor y los servicios higiénicos del Colegio Arrayán, ubicado en la Ruta S-31 que une Vilcún con San Patricio.
La alcaldesa de Vilcún, Susana Aguilera, llegó hasta el lugar en compañía de la concejala Sandra Pakarati, a fin de constatar y evaluar en terreno los daños provocados por el siniestro, que dejó importantes daños en la estructura de este establecimiento educacional particular subvencionado. Se sumó a esta inspección el seremi de Educación, Marcelo Segura.
"Vinimos a ponernos a disposición del colegio para colaborar en lo que podamos hacer como municipalidad", señaló la alcaldesa Susana Aguilera, quien agregó que "los apoderados están bastante consternados. Este es un colegio que se ha levantado con mucho cariño, y estamos dispuestos a colaborar ciento por ciento en lo que podamos, para que se reponga lo antes posible".
Se informó que se están realizando los peritajes correspondientes para establecer las causas del siniestro, en el que no hay seguros comprometidos.
El seremi de Educación, Marcelo Segura, indicó que su visita tuvo por objetivo expresar "todo el apoyo para el plan de contingencia, por cuanto al Ministerio le importa que este colegio siga funcionando porque hay una muy buena evaluación de este proyecto educativo". Por ello -acotaron el seremi y la alcaldesa Aguilera- se realizaron las gestiones para ver la posibilidad de contar con el apoyo de la Fundación Levantemos Chile en la reconstrucción.
ESCOMBROS
Todavía entre escombros humeantes, la alcaldesa de Vilcún recorrió el lugar, recogiendo testimonios de apoderados, alumnos y de la comunidad educativa en general, quienes expresaron su dolor ante la pérdida de las dependencias.
"Hoy vemos que todo los invertido, lo construido con tanto esfuerzo, todo está perdido, del corazón estamos bastante dañados", indicó Olga Rojas, presidenta del Centro de Padres, quien agregó que "agradezco la gentileza de la alcaldesa y todas las gestiones que se han hecho, su presencia y compromiso".
La directora del establecimiento, Pilar Salinas, llamó a la comunidad educativa a "mantener la confianza porque el Colegio Arrayán se pondrá de pie y saldremos adelante. Dios está con nosotros, y sabemos que lo lograremos".
En los próximos días, la comunidad educativa continuará trabajando en el despeje de escombros, a fin de retomar a la brevedad las clases en este establecimiento, cuya data es bastante reciente, del año 2012, y que cuenta con una matrícula de más de cien alumnos, repartidos entre prekinder y sexto básico.