Andrea Arias Vega
En sólo veinte minutos, y haciendo uso de su desplante, simpatía y una batería de chistes que sacaron, en más de una ocasión, carcajadas de la audiencia, el candidato presidencial de Chile Vamos y exmandatario, Sebastián Piñera, dio a conocer los tres pilares de su propuesta de campaña para la Región, en el marco del sexto Encuentro Ideas para La Araucanía, iniciativa que organiza El Austral en conjunto con la Universidad Santo Tomás.
El candidato partió esta alocución contando que los lazos que lo unen con La Araucanía se vinculan a su tío Bernardino Piñera, quien fue obispo de Temuco. En esa época y siendo él un adolescente, junto a su hermano el "Negro" Piñera, participaba de las misiones en la Región.
De la anécdota y ya enganchado con el público, Piñera planteó que La Araucanía es una Región "inmensamente rica, pero tremendamente empobrecida que está llena de oportunidades y motores, pero que no funcionan en plenitud", haciendo alusión al potencial agroalimentario, turístico y cultural que va de la mano del pueblo mapuche, como sus principales activos.
Recordó que a raíz de dicho diagnóstico, durante su Gobierno "actuamos como un padre con su hijo con La Araucanía", cuidado especial que se tradujo en la implementación del Plan Araucanía.
"Durante ese periodo la Región creció, redujo su pobreza a la mitad y logró tasas cercanas al pleno empleo, sin embargo, ese progreso se ha ido perdiendo y la Región está pasando por un proceso de estancamiento", sentenció.
PROPUESTA
Dicho lo anterior, el candidato planteó que su propuesta para enfrentar este escenario adverso, la cual se basa en tres pilares fundamentales.
El primero de ellos habla de un proyecto especial de desarrollo económico-social para la Región, de modo de "crear más empleos, generar más oportunidades, robustecer la tasa de crecimiento y, fundamentalmente, mejorar la infraestructura, lo que va a requerir de inversión pública y privada para los sectores urbanos y rurales sobre todo", acotó Piñera, indicando que dicho proyecto ya tiene nombre y que se trata del Plan Araucanía 2.0, el cual "esperamos ponerlo en marcha, a partir de marzo del próximo año".
El segundo pilar de su propuesta se lo dedicó a los pueblos originarios y en espacial al mapuche, que es el que tiene arraigo en la zona, no sin antes declamar la clásica estrofa del poema La Araucana y luego admitir que "se debe reconocer, valorar y destacar la cultura, las tradiciones y el lenguaje de los pueblos originarios, si lo que se busca es un desarrollo integral de La Araucanía".
El último pilar de su propuesta tiene que ver con combatir, con el mayor de los ahíncos, pero en un contexto de institucionalidad, la violencia que azota a La Araucanía desde hace dos décadas.
"El terrorismo no es un problema de los mapuches o los huincas, tampoco de la izquierda o la derecha, es un problema de todos aquellos que queremos vivir en paz. Al terrorismo hay que combatirlo con todo el rigor de la ley y no es una opción, es una obligación y eso no ha estado ocurriendo", enfatizó Piñera, quien adelantó que de llegar a La Moneda "perfeccionará y aplicará, sin ambigüedades, la Ley Antiterrorista".
Cuando habla de perfeccionar la Ley Antiterrorista, se refiere "a mejorar la inteligencia" con el propósito de desbaratar dichas organizaciones.
El candidato, al cierre de su ponencia, transportó a la audiencia al futuro, advirtiendo de los desafíos que tiene el país, en el contexto de la revolución tecnológica y la llamada internet de las cosas.
Dicho aquello, enlazó esta realidad con la política de su programa y la capacidad para anteponerse a este futuro, siendo su misión:"reemplazar el actual mal gobierno y recuperar para todos este gran país".
