Frases
"En marzo recibiremos un país estancado, con muchos problemas".
Sebastián Piñera,
"Lo tomamos con mucha humildad y responsabilidad. Esta es la región donde el Estado de Derecho ha fallado".
Felipe Kast,
"En marzo recibiremos un país estancado, con muchos problemas".
Sebastián Piñera,
"Lo tomamos con mucha humildad y responsabilidad. Esta es la región donde el Estado de Derecho ha fallado".
Felipe Kast,
Quedó constituido el Centro Cultural de Villarrica, el que tendrá la principal finalidad de luchar por la creación y puesta en marcha de una biblioteca pública y mantener el funcionamiento del Museo Histórico Arqueológico. A largo plazo deberá conseguir terrenos y construir un edificio para el funcionamiento de ambos centros culturales.
La jueza de Garantía de Villarrica, Adriana Knopel, rechazó ayer la petición de prisión preventiva que realizó el fiscal Néstor Riquelme y decidió dejar en libertad al chofer del camión implicado en el accidente donde perdieron la vida cuatro funcionarios de la Dirección de Vialidad del Ministerio de Obras Públicas.
El informe anual de Derechos Humanos de la Universidad Diego Portales, UDP, reveló que existen vacíos en las políticas públicas de la enseñanza del mapudungún en todo el país, sin embargo, la situación en La Araucanía no sería tan compleja. En la Región son 130 las escuelas en donde sus alumnos aprenden mapudungún.
A diferencia de los ochenta, el Chile que visitará el Papa Francisco en enero próximo es bastante diferente al que conoció San Juan Pablo II. Hoy el país tiene una de las economías más sólidas de la región, teniendo el PIB per cápita más alto, una de las tasas de pobreza más baja y una esperanza de vida de las más longevas. Aunque esta vertiginosa modernidad no sólo trajo beneficios, sino que profundos cambios en la familia. Hoy su tasa de fecundidad es una de la más baja de América Latina, y los casamientos, desde los años noventa, con alzas esporádicas, han ido en un constante descenso.
A diferencia de los ochenta, hoy Chile sí tiene una democracia, pero con muchísimos escándalos, corrupción y apatía que ha ido mermando la confianza en las instituciones, descrédito del que tampoco se ha salvado la Iglesia: Para 1995, el 46% de los chilenos tenía mucha confianza en ella, para 2016 sólo el 17%, según Latinobarómetro.
No es extraño así, que a diferencia de los ochenta, la pregunta que se hiciera San Alberto Hurtado si Chile "¿es un país católico?", tiene bastante más bemoles. Las cifras muestran que aún sí es, pero bastante menos que el que conoció Juan Pablo II. En la actualidad, dependiendo de la encuesta, alrededor de un 60% de los chilenos se declara católico, casi 15 puntos menos que a mediados de los noventa.
Cifras más, cifras menos, hoy el país es distinto al que conoció el Papa polaco, sus carencias pertenecen más a las de un país que entró en los beneficios y estragos de la modernidad. Sin duda, la próxima visita de Francisco, quien conoce bien Chile, puesto que sus últimos años de seminario los hizo aquí y como miembro del consejo del CELAM le tocó conocer de cerca la realidad de la región latinoamericana, vendrá con un mensaje de esperanza para un pueblo que aún conserva sus raíces católicas, a pesar de que tal vez no son los mejores tiempos. Un país que sigue siendo muy mariano, que ve como cada año más de un millón de personas peregrinan a la Virgen de lo Vásquez y 200.000 a la Virgen de la Tirana, entre otras festividades. Una nación que ha sido educada católicamente por una amplia red de colegios y por una gran universidad pontificia de prestigio internacional, y en que a lo largo de su historia, la Iglesia ha dado acogida de amor a los que fueron perseguidos políticamente como a los que sufren hoy, dándoles protección a través de numerosas instituciones de caridad.
A diferencia de los ochenta, la visita de San Juan Pablo II hace 30 años fue un mensaje de reconciliación en un país que estaba profundamente dividido y polarizado por su situación política. El Papa Francisco viene a un Chile más reconciliado y más rico que el que visitó San Juan Pablo II, pero que quizás, entre tanto avances, y parafraseándolo, es necesario que los católicos, y en este caso los chilenos, "salgan de su zona de confort, hagan lío y vayan a las periferias".
Francisco Javier Tagle,
Universidad de los Andes
La jornada electoral de ayer dejó varias sorpresas, las cuales convendrá analizar con mayor detención. Sin embargo, quizás lo más llamativo fue comprobar los erráticos pronósticos de las encuestas. La prestigiosa CEP, por ejemplo, anunciaba hace un mes que Sebastián Piñera obtendría 44% de los votos, y finalmente obtuvo 36,6%. Decía también que Beatriz Sánchez, la abanderada del Frente Amplio, alcanzaría un 8,5%, y en definitiva superó el 20%. Otras encuestas, estuvieron aún más imprecisas.
Precisamente, uno de los elementos sorpresivos de ayer fue la alta votación obtenida por la candidata del Frente Amplio, quedando a sólo dos puntos del postulante de la Fuerza de la Mayoría, Alejandro Guillier, lo que la consolida como un personaje relevante y decisivo en lo que será el escenario del balotaje, a pesar de que hasta anoche evitó pronunciarse ante un eventual apoyo al candidato oficialista.
El independiente José Antonio Kast también logró una votación que no estaba en los pronósticos. Y en el caso de La Araucanía, el diputado logró más del 12 por ciento de los votos, cuatro puntos más que a nivel nacional.
Tanto la alta votación de Beatriz Sánchez, como el buen desempeño de José Antonio Kast, son dos señales que los partidos tradicionales deben revisar con más atención. Hay un claro descontento, de casi un tercio de la población, con los bloques que han administrado el país desde el regreso a la democracia, y eso quedó reflejado en la votación que recibieron las candidaturas que torcieron los pronósticos de las encuestas.
Por otra parte, es destacable lo sucedido ayer en el país. Fue una jornada cívica ejemplar, sin mayores incidentes, salvo los episodios de violencia sufridos en La Araucanía.
Hay que valorar, nuevamente, el comportamiento de la ciudadanía regional, que concurrió a las urnas en un porcentaje mayor al esperado. Los votantes fueron, también, grandes ganadores.