Alimentación saludable
La Ley de Etiquetado hasta el momento es positiva. En seis meses más entra en vigencia la segunda parte de la normativa.
Según cifras del Ministerio de Salud, uno de cada once chilenos muere por causa de alguna enfermedad atribuible al exceso de peso. Lo que es peor, cada una hora muere una persona por culpa de la obesidad. Por tal motivo, en junio de 2016 entró en vigencia la Ley de Etiquetado de Alimentos, que tiene como finalidad proteger la salud de nuestros compatriotas, especialmente niños y niñas, a través de un marco regulatorio que permite al consumidor acceder a información más clara sobre el alimento que está adquiriendo; asegurar una oferta saludable en los establecimientos educacionales y proteger a los menores de la sobreexposición de publicidad.
En este año y medio desde que entró en vigencia la nueva ley, los primeros balances son positivos. Se ha logrado promover los cambios de hábitos en la población, la que cuenta ahora con una información más sobre los peligros que provocan algunos alimentos.
Por ello, en junio de 2018, entrará en vigencia una segunda etapa de la ley, la cual obliga a las empresas que venden productos procesados y envasados que se sometan a los nuevos límites máximos de nutrientes críticos de azúcar, sodio, calorías y grasas saturadas que establece la ley de junio de 2016.
Esta iniciativa obligará a reducir todavía más los niveles de nutrientes críticos en alimentos sólidos y líquidos, y de no cumplir con estas obligaciones, estos tendrán que llevar el sello de advertencia "Alto en" en sus etiquetas.
Según académicos de la Escuela de Nutrición y Dietética Universidad Andrés Bello, "esta medida es sumamente importante considerando las alarmantes cifras que arrojó la última Encuesta Nacional de Salud: 74% de los chilenos tiene sobrepeso y el 86% es sedentario. Por ello, esta regulación debe aspirar a ser como la Ley de Tabaco, que ha demostrado disminuciones importantes en el consumo a partir de las prohibiciones que estipula".
Sin duda esta ley representa un gran avance. Ahora la tarea es de los padres que deben promover con mayor fuerza una alimentación saludable para sus hijos.