El Austral
La Asamblea General de la ONU ratificó ayer el Pacto Mundial de Migraciones, que no es vinculante y que busca reforzar la cooperación internacional para una "migración segura". El documento, acordado entre 165 países a comienzos de diciembre en Marruecos, fue ratificado con 152 votos a favor, cinco en contra (Estados Unidos, Hungría, República Checa, Polonia e Israel) y 12 abstenciones, entre ellas Chile.
El pacto, el primero a nivel mundial para gestionar la migración, plantea 23 objetivos para desalentar la migración ilegal, en momentos en que el flujo de migrantes ha aumentado a casi 260 millones en el mundo, el 3,4% de la población global. Más del 80% de los que se mueven de un país a otro lo hacen de forma legal, pero más de 60 mil personas han muerto intentando atravesar fronteras ilegalmente desde el año 2000, según cifras de la ONU.
Varias polémicas surgieron en torno al acuerdo en varios países de la Unión Europea, que llevaron, por ejemplo, a la caída del Gobierno de coalición de Bélgica y a presiones para la renuncia del canciller de Eslovaquia.
El representante alterno de la misión permanente de Chile ante Naciones Unidas (ONU), Jorge Iglesias, ratificó ante la Asamblea General del organismo la decisión del Gobierno de abstenerse de firmar.
La postura chilena
Iglesias explicó ante el plenario en Nueva York que "la política migratoria de Chile está fundada en tres principios: la protección y el respeto por los derechos humanos universales de todos los migrantes, regulares o irregulares, en todo tiempo, en todo lugar y bajo cualquier circunstancia; el derecho de toda persona a dejar su país de origen y desplazarse libremente, dentro del territorio de un Estado, en el que se encuentra legalmente y el derecho soberano del Estado para determinar quiénes y bajo qué regímenes pueden ingresar a su territorio". El representante nacional agregó que "buscamos una inmigración que sea segura, ordenada y regular". Lo anterior, agregó, "significa ejercer una política de puertas abiertas para recibir a aquellos migrantes que vienen a iniciar una nueva y mejor vida, con la intención de respetar nuestras leyes, a aquellos que vienen a incorporarse a nuestra sociedad y a aportar al desarrollo de nuestro país".
El Presidente Sebastián Piñera aseguró ayer sentirse "muy tranquilo" con la decisión expresada en la ONU, pues indicó que "ha cumplido con mi deber de proteger los legítimos intereses de todos mis compatriotas".
"en conflicto"
Junto con reiterar la posición de Chile en materia migratoria y la política que ha seguido su administración en el último tiempo, el Mandatario recalcó que el Pacto "entra en conflicto" con algunos de los principios que persigue Chile en este ámbito. Agregó que el documento "no resguarda adecuadamente los legítimos intereses de Chile y de los chilenos y las razones las hemos dado en forma exhaustiva".