Rodrigo Zamorano C.
Por más de una hora prestó declaración ante el Tribunal Oral en lo Penal de Angol el carabinero de Fuerzas Especiales de Pailahueque que está imputado por haber sido el policía que disparó por la espalda al joven Brandon Hernández Huentecol, hecho ocurrido el 18 de diciembre del año 2016.
El testimonio del sargento segundo Cristian Rivera lo efectuó durante la primera jornada del juicio oral en su contra, en el que la Fiscalía lo acusa por apremios ilegítimos y lesiones graves, rechazando así su derecho a guardar silencio.
Ante los magistrados Germán Varas, Francisco Boero y Wilfred Ziehlmann, el carabinero declaró no saber quién disparó la escopeta calibre 12 que le causó heridas de diversa gravedad al joven de Collipulli.
Según indicó Rivera, el día de los hechos sólo habría escuchado de cerca el tiro que dejó a Brandon con más de 100 perdigones en su cuerpo luego del disparo a quemarropa con una escopeta.
"No recuerdo haber sentido el culatazo en mi arma", señaló en estrado el carabinero imputado, quien precisó que habría otro funcionario en las cercanías que pudo haber efectuado el disparo.
CONTRADICCIONES
El abogado de la familia Hernández Huentecol rechazó esta nueva versión de los hechos que entregó Rivera, asegurando que "hay contradicción en sus dichos respecto a sus primera declaraciones en la investigación", afirmó el abogado Sergio Millamán.
Para el fiscal que instruye la investigación, Nelson Moreno, el cambio de versión del carabinero imputado "es uno de los elementos que plantea el acusado, sin embargo, de acuerdo a los antecedentes de la investigación, entre ellos informes periciales, declaración de testigos presenciales, entre ellos el testimonio de Brandon, dan cuenta que quien disparó el arma es el imputado".
Para este jueves se espera que preste declaración ante los magistrados la propia víctima de los hechos, Brandon Hernández Huentecol, así como otros tres miembros de su familia.
Según se adelantó, el juicio en Angol podría tener una extensión aproximada a la seis jornadas.
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"Entregó elementos que no había señalado previamente, por lo tanto a nuestro juicio ello le resta credibilidad".
Nelson Moreno,, fiscal."
Querellantes piden 20 años de presidio
Los abogados de la familia Hernández Huentecol afirman que el carabinero Cristian Rivera tuvo el ánimo de matar al joven y es por eso que su acusación particular es por el delito de homicidio frustrado. José Luis Correa, abogado querellante por la familia víctima afirmó que "no tuvo otra intención que asesinar a nuestro representado, lo que felizmente no ocurrió dada la fortaleza de la víctima, pero aquí hubo el dolo de matar". En su acusación, los querellantes solicitaron una pena de 20 años de presidio por el delito de homicidio frustrado.