Lula deja la cárcel para ir al velorio de su nieto en medio de operativo de seguridad
TRASLADO. La autorización para ir al entierro del menor de siete años le fue otorgada por la corte de Paraná.
El expresidente de Brasil Luiz Inácio Lula da Silva asistió ayer sábado al velorio de su nieto de siete años, quien falleció el viernes debido a una meningitis meningocócica.
Para esto, el exmandatario salió de la prisión en la que se encuentra hace once meses en Curitiba -en donde cumple una condena por corrupción- y viajó al estado de Sao Paulo, en medio de un amplio despliegue de seguridad.
Lula recibió la autorización de la Corte Federal del estado de Paraná para asistir al funeral, ya que la ley de Ejecución Penal permite la salida de presos para velorios y entierros de familiares.
Así, según informó el diario Folha de S. Paulo, dejó la cárcel en horas de la mañana de ayer y abordó un helicóptero a las 7:00 horas de Brasil. De esta forma fue trasladado hasta el aeropuerto de Bacacheri, donde tomó un avión de la gobernación de Paraná hacia Sao Paulo, en donde se dirigió a Sao Bernardo do Campo.
El expresidente viajó en helicóptero hasta las cercanías del cementerio y el resto del trayecto fue hecho en auto.
Resguardo policial
Más de diez vehículos de la Policía Militar esperaron su llegada en el recinto. Los funcionarios armados quedaron a cargo de la seguridad en el exterior de la sala en donde se estaba llevando a cabo el velatorio, mientras que la seguridad de Lula quedó a cargo de la Policía Federal. Tuvo autorización para estar una hora y media en el lugar.
A los adherentes también se les permitió la entrada y la aglomeración en el lugar aumentó a lo largo de la mañana, pero los simpatizantes y políticos presentes tuvieron que dejar el lugar donde estaba el ataúd del menor fallecido, ya que la policía determinó que sólo familiares pudieran estar allí.
El Sindicato de los Metalúrgicos de ABC montó una estructura de rejas para controlar la entrada.
El nieto de Lula da Silva fue internado en un hospital en la mañana del viernes, en donde falleció a las pocas horas. Uno de los abogados del expresidente le comunicó la noticia durante la tarde. Al velorio también asistieron conocidas figuras del mundo político brasileño, como la exmandataria Dilma Rousseff y el excandidato a la presidencia Fernando Haddad.