"No veo que exista encrispación en el Parlamento. La oposición tiene el deber de no obstruir y de mejorar, pero el Gobierno debe escuchar".
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"El acuerdo debe ser planteado entre dos naciones, la chilena y la mapuche, más varias culturas. El error que han cometido los gobiernos es imponer los interlocutores"."
-¿Con este triunfo se posiciona como un referente de la oposición?
-Mi rol está con la oposición, pero tengo una responsabilidad con el país, ya que este cargo es el segundo político después del Presidente y, por lo tanto, mi rol será buscar el diálogo con el Ejecutivo y establecer relaciones fluidas, pero manteniendo las diferencias.
-¿Cuáles serán sus desafíos en el marco del cargo?
-Transparencia, modernización y eficiencia del Senado. La próxima semana presentaré un proyecto para celebrar un convenio con el Consejo para la Transparencia de modo que nos auditen y fiscalicen. El canal del Senado tiene que cumplir un rol de más apertura, también vamos a fortalecer el sistema electrónico de consulta para que la ciudadanía opine respecto de los distintos proyectos de ley y que vía firmas verificadas se pueda exigir una sesión especial de algún tema de interés.
-¿Qué leyes se deben discutir este año?
-El Senado debería discutir el matrimonio igualitario y hacernos cargos del proyecto de la nueva Constitución que quedó a mitad de camino. Queremos que la gente opine respecto de estas propuestas que la Presidenta Bachelet recogió y después le diremos al Gobierno que el debate está maduro para que continúe su tramitación. Queremos que se discutan las pensiones, pero que no se perpetúen la AFP. Y en materia de seguridad ser rigurosos respecto de iniciativas que parecen buenas, pero que son inadmisibles.
-¿Cuáles son inadmisibles?
-El proyecto de admisión justa no resolverá los temas centrales, hay distorsiones que corregir, pero se pueden hacer por la vía administrativa. En tributaria hay que recaudar más y cerrar los espacios de evasión, lo que no hace el proyecto actual. Y el de control de identidad de menores, así como está, no sirve. Cuidado con seguir presentando proyectos que no son útiles para resolver los problemas de los chilenos y chilenas.
-¿Es factible el matrimonio igualitario en este Gobierno?
-Yo estoy tomando constancia de un hecho que debiera ocurrir en un Estado laico. Yo no respaldo el régimen de Maduro, pero para ser coherentes con los DD.HH. hay que respetar el derecho que tiene cada persona para elegir a quien amar.
-Blumel dijo que este Gobierno no la tiene fácil con la oposición. ¿Está de acuerdo?
-No veo que exista encrispación. Lo que pasa es que el 2018 no fue bueno para nadie, cómo va ser bueno que el Presidente termine con un 37% de apoyo. La oposición tiene el deber de no obstruir y de mejorar, pero el Gobierno debe escuchar.
-¿Cuál es su balance del primer año del Gobierno?
-La llegada de Atton le ha dado un empuje distinto a la Región. Estamos al debe en aumentar el presupuesto del FNDR este año y han faltado iniciativas generadas en este Gobierno. Hoy se están haciendo obras importantes, pero quedaron financiadas en el Gobierno anterior. Falta que nos digan qué proyectos impulsará esta administración.
-Pero Atton anunció un FNDR adicional para este año...
-En la ley de presupuesto eso no se ha visto. Si el Presidente va a asignar un nuevo FNDR, eso requiere ley y para eso tiene que presentar el proyecto. Cualquier iniciativa que signifique más plata para La Araucanía los votos van a estar.
-¿Qué balance hace del acuerdo nacional del gobierno que prioriza a La Araucanía?
-El acuerdo debe ser planteado entre dos naciones, la chilena y la mapuche, más varias culturas. El error que han cometido todos los gobiernos es imponer los interlocutores, los temas de la agenda y los plazos. No sacamos nada con llegar a un acuerdo con el 99% si ese 1% lo va a echar por tierra.
-En su discurso comparó a la Región con el Vietnam de los '70. ¿De quién es la culpa?
-Esto me lo han dicho muchos empresarios turísticos. Al colocar la etiqueta del terrorismo se afecta el turismo. Soy el primero en condenar los hechos de violencia, pero hay mucha gente de un lado y otro que está aburrida de esa discusión que no resuelve nada. Si queremos alcanzar la paz hay que conversar con todos los actores.