Rodrigo Zamorano
A solo días que finalice el plazo de investigación por el crimen de Yini Sandoval y sus tres hijos, un antecedente que llama la atención de los intervinientes ha sido el constante cambio en las declaraciones que ha entregado a la PDI el único imputado de la causa, Claudio Tolosa Llanquinao.
El técnico mecánico está recluido en la Cárcel de Temuco, bajo la medida cautelar de prisión preventiva desde octubre del año pasado, tras haber sido detenido por la PDI por su responsabilidad en el crimen de su expareja, quien falleció además junto a sus tres hijos en medio de un incendio en el sector San Antonio de Temuco, la madrugada del 29 de diciembre de 2016.
El interés de la PDI por Tolosa se remonta a los pocos días de la muerte de Yini, cuando es citado a declarar en calidad de testigo. La policía está al tanto que uno de los menores de edad fallecidos es hijo de Tolosa y basan su interrogatorio en la relación que el mecánico tenía con la joven.
"Conocí a Yini los primeros meses del año 2013. Tuvimos una relación informal quedando ella embarazada y naciendo mi hijo en el mes de febrero de 2014", narra Tolosa ante los oficiales de la PDI, Daniel Araneda y Leonardo Contreras, el 6 de enero de 2017.
Al ser consultado por su paradero el día del crimen, el técnico mecánico asegura a los policías que "me encontraba en mi domicilio junto a mi pareja y mis dos hijos. Esa noche estuve desde las 19.30 horas y me acosté a las 11 y media de la noche. Me enteré de ocurrido en la mañana siguiente, en mi trabajo".
Los relatos
Tuvieron que pasar 17 meses para que Tolosa nuevamente fuera llamado a declarar ante la PDI en calidad de testigo, porque algo no le cuadraba a los policías. Un peritaje de georreferenciación de su teléfono lo ubicaba la madrugada del crimen bajo la celda de la antena telefónica que cubre el domicilio de Yini Sandoval, a más de 4 kilómetros de la casa de Tolosa.
El 22 de junio, en el cuartel de la Policía de Investigaciones, los detectives interrogan nuevamente a Tolosa, quien ahora revela que "después de las 3 de la mañana, Cecilia (su pareja) me comentó que había un incendio en el sector de San Antonio, lo cual habían publicado en una página de Facebook , además esto era en calle Malvoa (donde vivía Yini) lo cual me causó preocupación y salí de mi casa en mi automóvil (...) Llegué por calle León Gallo, quedando como a dos cuadras del incendio, había mucha gente alrededor y se veía que salía mucho humo pero no lo asocié que era en la casa de Yini ".
Temor
Con los resultados de las pericias, el fiscal Mandiola gestiona ante el Juzgado de Garantía una orden de detención en contra de Tolosa y lo detienen el 4 de octubre de 2018. Allí, Tolosa entrega una nueva versión de los hechos, indicando que los relatos anteriores no dijo la verdad "por temor".
En su tercer relato a la policía, Tolosa asevera que la madrugada del crimen de Yini fue a la casa de la víctima, a las 12 de la noche, quedando estacionado fuera de la casa por alrededor de una hora.
"Me bajé de mi auto, vi el portón que estaba abierto y estaba la puerta de la casa cerrada, la toqué y me abrió Yini y me dijo que pasara", afirma Tolosa ante dos oficiales de la policía y frente a los fiscales Alberto Chiffelle y Jorge Mandiola.
Tolosa indicó que su expareja se le abalanzó con un cuchillo en la mano. "Me comenzó a amenazar con el arma y a decir que no me fuera, que me quedara con ella", relata.
Finalmente, el imputado le narra a los policías: "En uno de los forcejeos, recuerdo uno con mucha fuerza, ella se quejó de un dolor en el pecho (...) me dijo: mira lo que me hiciste. Se me fue encima varias veces, pero yo la empujaba".
Tolosa posteriormente insiste en que seguía forcejeando con Yini en el marco de la puerta, momentos en que vio como nuevamente el cuchillo se iba hacia el cuerpo de su expareja. "Debió haberse daño en el forcejeo", afirmó. El imputado termina su declaración aseverando que sale de la casa mientras Yini quedaba tambaleándose, afirmada de un sillón.
Respecto al incendio, Tolosa indica que "había un calefactor encendido, porque hacía mucho calor adentro, pero del tema del incendio, yo no sé nada".
Con el testimonio, la Fiscalía formalizó investigación contra Tolosa, quien desde entonces permanece en prisión preventiva.
En enero de 2019, en tanto, Tolosa entrega una nueva versión, esta vez en el Juzgado de Garantía de Temuco, donde señala que su última declaración la realizó bajo presiones y apremios de los detectives de la PDI.
"Me dijeron que lo más barato que me salía era asumir la culpa", señaló en la audiencia el imputado, asegurando además que lo que realmente había pasado es que esa noche visitó a Yini cerca de las 12 de la noche, sin embargo, que solo habían conversado en la calle y que le había hecho entrega de un dinero, pasando después a la casa de un amigo en el sector.
Consultada por las diferentes versiones entregadas por Tolosa, la madre de Yini Sandoval, Alda Reyes, quien actúa como querellante en la causa, señaló que "Claudio siempre ha mentido, ha cambiado su historia cada vez que lo hacen declarar y siempre acusa a mi hija de que era una mala madre".
"Claudio siempre ha mentido, ha cambiado su historia cada vez que lo hacen declarar y siempre acusa a mi hija de que era una mala madre"
Alda Reyes, madre de Yini Sandoval
Diligencias
El fiscal de la causa, en tanto, Jorge Mandiola, señaló que "al principio entregó una versión que fue posteriormente contrastada con diligencias de investigación que se realizaron durante los meses siguientes al crimen, donde se pudo desvirtuar la primera declaración". Mandiola agrega que "se le toma una nueva declaración como testigo donde acomoda su nueva versión, ante lo cual se realizaron diligencias de investigación logrando acreditar que esa declaración, a la luz de los antecedentes que se manejaban en la carpeta, tampoco sería correcta". El pesercutor además indicó que "ya en el proceso de investigación formalizada, presta una cuarta declaración en el Tribunal.