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Luchsinger: 80 testigos y peritos llevará Fiscalía a juicio para condenar a machi

tribunales. Concluyó la preparación de juicio oral contra Celestino Córdova, la que duró cerca de un mes y medio. Si no hay apelaciones, el juicio tiene como fecha tope de inicio febrero de 2014.
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Un total de 80 testigos y peritos buscarán convencer a los jueces del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Temuco, que el machi Celestino Cerafín Córdova Tránsito (26) participó en el atentado incendiario al fundo Santa Isabel y en la muerte de Werner Luchsinger y Vivian Mackay.

Así quedó conformada la prueba testimonial y pericial de la Fiscalía Regional y los querellantes, quienes pretenden condenar a la autoridad religiosa mapuche por delitos de carácter terrorista. A esto se suman 24 documentos y 43 pruebas materiales que serán expuestas al tribunal.

El antecedente se conoció ayer tras el fin de la audiencia de preparación de juicio oral, la que se suspendió en cuatro ocasiones, por solicitud de la defensa, y que se extendió por más de un mes y medio.

Fueron en total 13 jornadas donde fiscales, querellantes y abogados defensores, dirigidos por la jueza de Garantía Marcia Castillo, filtraron cada uno de los antecedentes que llegarán al juicio contra Córdova Tránsito.

De ahora en adelante comienzan a correr los plazos legales. En el escenario de que ninguno de los intervinientes apele al auto de apertura leído ayer y compuesto por 36 páginas, la fecha tope de inicio del juicio contra Córdova es el 14 de febrero de 2014. De haber apelaciones, este plazo se podría extender.

los testigos

El primer hecho donde figura como acusado Córdova es el atentado al fundo Santa Isabel, ocurrido el 22 de diciembre de 2012, donde encapuchados quemaron tres vehículos, una casa, robaron dos celulares y ocho armas de fuego.

Tres miembros de la familia resultaron con lesiones tras el asalto a la vivienda. Sólo el avalúo de los vehículos destruidos en el incendio fue estimado en más de 31 millones de pesos.

Por este delito declararán 10 personas vinculadas a la familia Seco Fourcade, vecinos y trabajadores del fundo. Además, está citado el médico que atendió a las víctimas y dos funcionarios de Carabineros que tomaron el procedimiento en terreno.

El resto de la prueba testimonial se enfoca en el caso Luchsinger. Entre ellos destacan tres hijos del matrimonio asesinado: Jorge, Mark y Jaime Luchsinger Mackay. También figuran trabajadores y vecinos de la familia.

Además siete efectivos de la Policía de Investigaciones y 16 carabineros relatarán las diligencias que realizaron luego que ocurrieron los dos atentados incendiarios.

delitos terroristas

Uno de los puntos que serán clave para el Ministerio Público y los querellantes será acreditar en el tribunal el carácter de terrorista de los atentados donde se acusa al machi.

Para esto citaron a declarar a cuatro dirigentes gremiales de La Araucanía. Se trata de Emilio Taladriz, vocero de la Multigremial; José Villagrán, de la Asociación de Dueños de Camiones; Gastón Caminondo, presidente de la Sociedad de Fomento Agrícola (Sofo); y Manuel Riesco Jaramillo, ex presidente la Sofo y agricultor de Vilcún.

Según el documento leído ayer en el tribunal, que puede ser apelado en un plazo de cinco días, se estipula que Villagrán, Taladriz, Riesco y Caminondo darán testimonio de cómo "tomaron conocimiento de los hechos de la acusación y de cómo producen temor en la población o en un sector determinado de la misma".

Para estos mismos efectos, la parte querellante, asumida por el abogado Carlos Tenorio, ofrece como testigos a Eduardo Luchsinger Schifferli y Jorge Luchsinger Villiger.

Ambos miembros de la familia relatarán la forma en que el atentado del 4 de enero "ha sido desarrollado con la finalidad de generar temor en la población o en un grupo o una parte de ella; y como en particular esos hechos han afectado a la familia Luchsinger".

acusadores

Querellantes y acusadores se mostraron ayer satisfechos tras el fin de la audiencia de preparación de juicio oral, donde aprobaron la mayoría de las pruebas que presentaron en el texto acusatorio.

El fiscal regional Cristián Paredes dijo estar confiado en que las pruebas incluidas en el juicio serán suficientes para declarar culpable a Córdova.

"Fue una jornada ardua, que se extendió en el tiempo más de lo que habíamos pensado. Lo relevante es que se cerró esta etapa y estamos en condiciones de presentarnos al juicio oral", dijo.

El persecutor no descartó que apelar al auto de apertura, situación que van a evaluar en el plazo de cinco días que tienen disponibles.

El querellante Carlos Tenorio también comentó su conformidad, pero recordó que en el caso de la muerte del matrimonio Luchsinger Mackay hay otros sujetos que permanecen prófugos.

"Esta parte querellante quiere que responda cada uno de los responsables. Pero comprendemos la dificultad de la investigación. Estamos 100% abocados en lograr una sentencia ejemplificadora y condenatoria contra el acusado", afirmó.

defensa

Pablo Ortega, defensor particular, criticó la inclusión de un peritaje clave para la Fiscalía, que sitúa en las cercanías de las casa atacada al machi Celestino Córdova.

Recordó que este documento hace referencia a otro informe planimétrico de la PDI, al que finalmente nunca tuvieron acceso. "Se atentó seriamente contra la posibilidades de defensa de nuestro representado", apuntó.

El jurista recordó lo importante que significa para su teoría del caso un peritaje balístico, el que descarta que fue el arma de Luchsinger la que hirió a Córdova. Esto porque no se hallaron trazas de níquel en la herida ni en la ropa del acusado. "La Fiscalía tendrá que rehacer su teoría del caso", señaló.

Las pruebas que serán clave en el juicio

Hay dos pruebas que son clave para el juicio. Una de ellas corresponde a un peritaje balístico de Lacrim, que usará la Fiscalía, donde en sus conclusiones se indica que el machi estaba a menos de 10 metros de la casa cuando fue baleado por Luchsinger. El otro es de la defensa y descarta presencia de níquel en el acusado y su ropa. Esto desecharía la tesis de que fue la víctima quien hirió al imputado.