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Buscan traslado definitivo de la escuela Boyeco por la contaminación en la zona

Polémica. El intendente Andrés Molina intenta aprobar en el Consejo Regional $1.600 millones para remodelación del establecimiento. Equipo de DD.HH. de la Ufro está en alerta por anuncio.
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Preocupado. Así está el equipo de Derechos Humanos (DD.HH.) de la Universidad de La Frontera, debido al último anuncio efectuado por el intendente Andrés Molina sobre la remodelación de la Escuela G-523 Boyeco, en la comuna de Temuco.

Esto porque el establecimiento se ubica a tan sólo 300 metros del vertedero más grande de la Región y cuya contaminación ha afectado la biodiversidad de la zona, como lo ha establecido el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH).

A pesar de esto, el representante del Ejecutivo en La Araucanía presentó un mensaje en el Consejo Regional que busca aprobar $1.600 millones de pesos, para readecuar las instalaciones del complejo educacional y recibir a otros 100 alumnos de sectores aledaños.

Serán en total 350 niños y se enmarca dentro de una de las metas del Plan Araucanía 7, a través del cual se pretende cerrar un significativo número de escuelas unidocentes, según señalan en el Ejecutivo.

"Estas escuelas de concentración nos permiten avanzar en la meta que nos propusimos en el Plan Araucanía de bajar las escuelas con un solo profesor y que los niños lleguen a estudiar acá, donde tienen todas las facilidades", dijo Andrés Molina.

Sueño

Incluso, el proyecto es apoyado por el director del establecimiento, Adán Morales, quien calificó como un sueño la remodelación de la escuela, que posee como vecino un vertedero que recibía 7 mil toneladas de basura al mes.

"Es un proyecto muy importante para nuestra comunidad, se trabajó para eso y actualmente se está haciendo realidad algo que soñamos y esperamos que en el corto tiempo se pueda llevar a cabo", dijo Morales.

Gases tóxicos

Según la académica y miembro del equipo de DD.HH. de la Ufro, Mireya Palavecinos, hace más de 10 años que los niños están expuestos a la inhalación de gases tóxicos, lo que ha sido denunciado a organismos internacionales.

"El problema que nosotros vemos es que desde hace ya unos 10 años, los niños que están allí, están sufriendo durante todo el año una exposición a la contaminación por gases tóxicos que es altísima", aseguró Palavecinos.

A esto se suma, una serie de problemas de salud que han sido denunciados a organismos internacionales y que según el INDH se exhortó al "Estado a tomar medidas inmediatas para resolver el problema de los basurales que fueron instalados en comunidades mapuches, sin su consentimiento previo", dice un informe de mayo de este año.

"Hay problemas de salud muy graves, como meningitis prolongada, vómitos, náuseas, diarreas. Incluso, existen momentos en que los niños se han llegado a desmayar producto de los gases, en meses como noviembre y diciembre, dependiendo de la temperatura", aseveró la Mireya Palavecinos.

Core

El equipo de DD.HH. estima que este establecimiento debe ser construido en otro lugar y en paralelo, cerrar de forma definitiva el vertedero Boyeco. "Esto es como una pequeña La Greda, pero nadie sabe lo que está ocurriendo ahí", subrayó la académica de la Ufro.

Frente a esta preocupación, los miembros de la casa de estudios están solicitando una reunión con los miembros del Consejo Regional (Core), para que revisen estos antecedentes medioambientales, antes de votar el proyecto de Gobierno.

"Nos interesa conversar con los consejeros regionales, para que voten informados. Nosotros no estamos en contra de la remodelación, sino que se mejoren las condiciones de esos niños", dijo Mireya Palavecinos.