Secciones

Carabineros relataron en el juicio cómo detuvieron al machi Celestino Córdova

E-mail Compartir

Hugo Oviedo

Los carabineros Luis López y Alejandro Rivera son los efectivos policiales que lograron la detención del machi Celestino Córdova Tránsito (27), la madrugada del 4 de enero de 2013, tras el crimen del matrimonio Luchsinger-Mackay.

Ellos son dos de los siete testigos y peritos que presentó la Fiscalía el día de ayer, al celebrarse la cuarta jornada de juicio oral en el tribunal de Temuco. Ambos reconocieron en el estrado las ropas y la linterna que portaba el mapuche la noche del ataque.

López y Rivera cumplían medidas de protección al interior del fundo Palermo, que sufrió un atentado incendiario en julio de 2012 y que dejó en cenizas la casa patronal de la familia Taladriz.

A la 1.30 de la madrugada fueron alertados por la Central de Comunicaciones (Cenco) de Carabineros, que desconocidos habían atacado el fundo Granja-Lumahue, propiedad de Werner Luchsinger (75).

Tras la comunicación radial, la pareja de carabineros se dirigió hasta la casa del cuidador del fundo Palermo Chico, Héctor Meza, que el día de ayer también declaró, pero lo hizo detrás de un biombo para resguardar su identidad.

La breve conversación que mantuvieron las tres personas, fue interrumpida por unos quejidos que provenían muy cerca del camino público que divide ambos fundos y que se ubica a unos 15 metros de la vivienda del obrero agrícola.

A pie y en medio de la oscuridad López y Rivera se dirigieron hasta el camino que une el sector de General López (Vilcún) por el norte y Tres Cerros (Padre Las Casas) por el sur.

En ese lugar los quejidos se hicieron más nítidos y provenían de una persona que se encontraba al interior del fundo Granja-Lumahue, con dirección contraria al incendio de la casa patronal.

Los uniformados declararon que en un primer momento pensaron que se trataba de una de las víctimas del ataque, ya que las comunicaciones radiales indicaban que la pareja de ancianos se encontraba desaparecida y era posible que uno de ellos estuviera herido.

"Al ingresar al cruce Tres Cerros en la vía pública nosotros lo alumbramos con las linternas que portábamos y nos percatamos que parte de su cara estaba cubierta por una polera de color negro. Además, adosada a su cuello portaba una linterna de color azul con plomo", dijo Luis López.

El uniformado añadió que al consultarle el motivo de sus quejidos, el machi se remitió a responder "que estaba lesionado a la altura del abdomen y no iba a declarar porque era mapuche", dijo López a los jueces Luis Sarmiento (presidente), Juan Santana (redactor) y Oscar Viñuela (integrante).

Tras la detención, los carabineros pidieron refuerzos.

Sólo cuatro minutos demoró en llegar al lugar un carro policial, en el que se desplazaban dos miembros de la Dirección de Inteligencia Policial de Carabineros (Dipolcar).

Uno de ellos, el jefe del cuadrante 11, Omar García, relató al tribunal que tras subir esposado a Córdova Tránsito ordenó al chofer sacarlo del lugar por motivos de "seguridad".

Es así como Manuel Barros (Dipolcar) condujo el carro hacia unos 200 metros del cruce, con dirección al fundo Las Vertientes, propiedad del hijo del matrimonio de agricultores, Jorge Andrés Luchsinger.

Ahí las luces del vehículo alumbraron hacia una cerca metálica que estaba cerrada con cadena y candado. Detrás de ella pudieron divisar la sombra de una persona, por lo que García decidió bajar del móvil estacionado y mirar por encima de la cerca.

Según su declaración, fue en ese momento que "esta persona se encontraba arrodillada a un costado del galpón. Cuando trepé el cerco esta persona se incorpora, se pone de pie y me apunta con un arma de fuego larga, una escopeta. Me solté y caí cerca del carro policial", relató García.

Al incorporarse, el funcionario de la Dipolcar añadió que "esta persona huyó y llevaba una distancia de 8 a 10 metros", desde el lugar donde se encontraba, a un costado del camino.

Pasadas las 2.30 de la madrugada del 4 de enero llegó hasta el lugar una ambulancia del Samu desde el hospital de Vilcún. Ahí el paramédico Luis Muñoz efectuó los primeros auxilios al mapuche, que mantenía una herida en la zona torácica.

"Me duelen las esposas", fue la breve conversación que sostuvo Muñoz con el machi quien tenía una herida de bala bajo la tetilla derecha con salida de proyectil bajo la axila.

El fiscal exclusivo del caso, Cristian Paredes señaló que la declaración de Carabineros "ha dado razón suficiente de la circunstancia de la detención de Celestino Córdova. Fue detenido huyendo desde el predio del matrimonio Luchsinger-Mackay, agitado y herido, con su rostro semicubierto", enfatizó.

Por su parte, la abogada defensora de Córdova, Karina Riquelme, indicó que "Celestino Córdova fue herido con anterioridad a los hechos y hoy día ha quedado claro que numerosos funcionarios escucharon disparos antes de que supieran que se estaban registrando estos hechos en el fundo la Granja", subrayó.