Muebles Santa Ana: la ambiciosa apuesta de la empresa regional
Hace 21 años, cuando el entonces agricultor Ricardo Torrealba decidió cambiar de giro, probablemente no dimensionó los alcances que tendría su emprendimiento, actualmente convertido en la empresa de muebles más grande del sur de Chile.
Con el correr de los años, Muebles Santa Ana (MSA), pequeña empresa familiar fundada el año 1993, se ha ido reinventando constantemente, logrando competir sin problemas con las grandes cadenas del retail nacional.
Con una apuesta por la calidad y con líneas decorativas basadas en la idiosincrasia e intereses de los temuquenses, poco a poco MSA comenzó a ampliar sus ejes de acción, razón por la cual su tradicional local, ubicado en la esquina de calle Prat con Andrés Bello, ya no dio abasto.
Por este motivo, la empresa -que a pesar de su expansión se esmera en mantener un espíritu regionalista y familiar- decidió emprender con un nuevo proyecto: un edificio de más de 1.500 metros cuadrados completamente para ellos, donde a partir del primer semestre de 2014, podrán exhibir sus colecciones.
El edificio, que espera ser inaugurado durante el primer trimestre de este año, pretende coronar este pequeño "holding" regional, el que además mantendrá sus actuales locales del Mall Portal Temuco y el de calle Andrés Bello.
"Mi familia por ambos lados era de agricultores, y por la inestabilidad de ésta área, sumado a que tenían a tres hijos que educar, mis padres decidieron partir con un emprendimiento súper chico: una tienda de muebles en el Mall Temuco, que quedaba en la salida norte. Era súper chico, y el único fin era que fuese un ingreso sustentable para la familia, nada más.", relata Rodrigo Torrealba, actual gerente comercial de MSA.
A pesar que aquel centro comercial temuquense fue cerrado, el emprendimiento de los Torrealba siguió creciendo: "el 2001 partimos con la fábrica, y comenzamos a hacernos más conocidos", cuenta Rodrigo, quien agrega que actualmente, "estamos los tres hermanos, mis padres y una tía trabajando en la empresa. Somos seis integrantes, cada uno preocupado de áreas distintas".
Estos nuevos alcances de la empresa fueron los que hicieron a los Torrealba Maass emprender con este nuevo edificio, cuya inversión prefieren mantener en silencio.
"La empresa se divide en tres áreas. La primera, es la fabricación de muebles y elaboración de proyectos. Por ejemplo, habilitamos todos los muebles de oficina de la Intendencia de La Araucanía y del Hospital de Concepción, entre otros", explica el gerente comercial de MSA, agregando que "la segunda, son los muebles de hogar, que se dividen entre los que vendemos en nuestras tiendas y lo que distribuimos en el país, desde Antofagasta a Punta Arenas, a locales similares al nuestro".
En cuanto al tercer giro de la empresa, corresponde a la Constructora e Inmobiliaria Santa Ana, a cargo del menor del clan, el arquitecto Mario Torrealba.
"Nuestros padres nos incorporaron en el trabajo desde chicos. Fue algo natural, creo que ni siquiera nos dimos cuenta cuando estábamos aquí", confiesa Ricardo Torrealba, hermano mayor del grupo familiar, quien está a cargo de las tiendas y la fábrica.
En ese sentido, los hermanos indican que una de las claves para trabajar armónicamente en familia, es el respeto.
"Cada uno tiene demarcadas sus áreas y nos respetamos las decisiones", afirma Ricardo, cuya frase es complementada por su hermano Rodrigo: "Creo que eso ha sido fundamental".
La reinvención y la amplia gama de servicios anexos que ofrecen han sido la clave del crecimiento de la empresa, lo que les ha permitido diferenciarse de las grandes cadenas del retail.
"Nos hemos diferenciado trabajando con productos distintos y de buena calidad, conociendo el mercado de la gente del sur", acota el mayor de los hermanos.
Ricardo Torrealba agrega que, en ese sentido, "el retail sigue una tendencia que viene desde Santiago. Aquí tenemos una línea mucho más clásica, donde además trabajamos con importadores directos, por lo que tenemos la mejor relación precio - calidad en muebles".
"El proyecto nace por la inquietud de tener un espacio propio, que aglutine todas las áreas de la empresa. Hoy el gran problema es que no tenemos dónde mostrar todo lo que vendemos", señala Rodrigo, quien destaca que a lo largo de estos veinte años, este avance es parte del crecimiento y evolución natural de MSA.
Por su parte, Ricardo agrega que "hoy día no podemos exhibir todo lo que tenemos. Ahora vamos a poder tener líneas contemporáneas, además de los clásicos".