Los familiares del dirigente social asesinado en Angol claman justicia
Eduardo Namoncura
Familiares de David Celestino Illanes Illanes, de 31 años, exigen que se haga justicia por la muerte del dirigente social que la madrugada del domingo fue brutalmente asesinado, luego de que un grupo de cuatro sujetos lo atacó tras haber participado de una fiesta.
Los restos de David Celestino son velados en la Capilla María Auxiliadora, de la población Los Copihues, hasta donde llegaron familiares, amigos y pobladores del sector, impactados por la crueldad del crimen.
La madre y el hermano de David Celestino Illanes, claman por justicia y además piden que a los culpables se les aplique el máximo peso de la ley. Profundamente afectados y dolidos por repentina pérdida, exigen que la justicia haga su trabajo y dicte las condenas pertinentes.
"Nos sorprende la brutalidad y la cobardía de quienes mataron a David, ya que quienes lo mataron conocían a mi hermano de hace años, incluso se podría decir que eran amigos, ya que en muchas ocasiones compartieron juntos", puntualizó Miguel Ortega Illanes, hermano de la víctima.
Cristina Illanes, madre del malogrado dirigente, relató que "lo que le hicieron a mi hijo es de una cobardía y maldad muy grande. Mi hijo era un hombre tranquilo, muy trabajador, por eso su muerte es algo que no logramos explicarnos", agregó.
El padrastro del occiso, Ariel Ortega, comentó que espera que "se haga justicia en este caso, David era un hombre trabajador y muy buena persona, por ello es que yo pido que a los culpables los sequen en la cárcel, ya que estos tipos están acostumbrados a hacer este tipo de cosas", dijo.
Finalmente, la madre de la víctima aseveró que la muerte de su hijo, además de ser una gran pérdida para su familia, lo es también para población, dado que "mi hijo era reconocido como una persona muy amable y siempre dispuesta a ayudar a los vecinos que lo necesitaran".
Los tres detenidos por este crimen y que fueron identificados por la pareja de la víctima, fueron pasados a control de detención el mediodía del lunes, sin embargo, el plazo de formalización de cargos se amplió para hoy, a la espera del informe emanado del Servicio Médico Legal, donde se establecen las causas reales del deceso.
Los detenidos fueron identificados como Pablo Oñate Saavedra, de 26 años; José Antonio Erices, de 31; y Sergio Eduardo Ortiz, de 30 años. Además el subprefecto de la PDI, Pablo Neira, dijo en horas de la mañana del lunes que "la detención del cuarto sospechoso es inminente, dado que se encuentra completamente identificado".
La víctima era conocida en Angol y sobre todo en la población Los Copihues, donde vivía, puesto que poseía una destacada labor como dirigente social. Entre sus principales acciones en pos de la comunidad, Illanes se opuso tenazmente a la instalación de un grupo de antenas que una empresa telefonía celular pretendía levantar en su población.
El crimen causó gran conmoción en el sector donde el malogrado dirigente vivía, conocido entre sus vecinos como una persona alegre, trabajadora, cooperadora y de muy buena voluntad. Por ello su lamentable deceso golpea fuertemente a sus familiares y amigos que no se explican aún las razones de lo sucedido.