Actores regionales analizan la Reforma Tributaria de Bachelet
Macarena Álvarez
Tras darse a conocer el proyecto de ley de Reforma Tributaria, que entró al parlamento durante la jornada de ayer, las reacciones no se hicieron esperar, sobre todo entre los diversos actores del sector productivo, los que -preliminarmente- parecen ser los más afectados.
Si bien la reforma planteada por la Presidenta Bachelet a través del ministro de Hacienda, Alberto Arenas, no contempla una dimensión regional, los actores locales ligados tanto al mundo empresarial, emprendedor y a la academia manifestaron su opinión al respecto.
Aunque los expertos coinciden en que en términos generales esta reforma no influye considerablemente sobre el bolsillo del ciudadano común, consideran que sí puede traer ciertas complicaciones a las pequeñas y medianas empresas, sobre todo en relación a cómo se implementará la eliminación del FUT (Fondo de Utilidades Tributarias).
"La reforma está mucho más enfocada al tema empresarial", señala el economista y docente de la Universidad Autónoma de Chile sede Temuco, Patricio Ramírez, quien agrega que "no hay un cambio directo y claro para la pyme. No hay medidas que estén concentradas en éstas".
En ese sentido, Ramírez enfatiza que, si bien subirá el impuesto pagado por las empresas (de un 20% a un 25%), en el caso de los microempresarios éstos tendrán ciertos beneficios, como la depreciación instantánea a los bienes nuevos y usados (maquinaria) y el cambio en el sujeto del pago del IVA, donde las grandes empresas asumirán el pago de sus proveedores.
En cuanto a los posibles riesgos de la reforma tributaria, el economista de la UA indica que "como se va a subir el impuesto a las empresas, lo que podría pasar en los sectores económicos donde la competencia no sea muy fuerte, es que las empresas terminen aumentando sus precios".
Otro de los efectos que eventualmente podría traer este proyecto, es el aumento en el impuesto de timbres y estampillas. "Éste lo tomamos todos cuando sacamos un crédito. Es un porcentaje chico, pero ahora se sube para recaudar más plata", explica Ramírez.
En relación a la baja en la tasa de impuesto a las personas que se ubican en el mayor tramo imponible, la cual pasa de un 40% a un 35%, el académico de la UA señala que beneficia a muy poca gente, y que su fin es evitar la evasión.
"Es para aquellos que ganan más de $6.200.000 mensual, que es un porcentaje muy bajo de la población chilena", acotó el economista.
Dentro de las falencias del proyecto, Ramírez destaca la falta de un enfoque regional, donde se fomente la inversión en determinadas zonas de Chile, como por ejemplo en La Araucanía, cuyas cifras de pobreza y cesantía son mayores a la media nacional.
Otro de los temas no abordados, es el IVA. "No se toca nada en cuanto al IVA. Si bien es un 19% para todos, las personas de menos ingresos destinan casi todo su presupuesto a la compra de alimentos, por lo tanto, ese impuesto termina siendo proporcionalmente más alto en relación a sus rentas", explica Ramírez.
"Aunque falta ver 'la letra chica