'Pedro, Juan y Diego', el regreso a las tablas locales 30 años después
Teatro. A tres décadas de su primera versión regional, la obra de David Benavente está en la cartelera de Temuco con gran parte del elenco original.
La comedia inspirada en los programas de trabajo PEM y POJH, 'Pedro, Juan y Diego', regresa a la cartelera de Temuco 30 años después de su estreno local, y lo hace con el elenco original, o casi todo, en funciones los viernes y sábados de junio, a las 20.30 horas, en el Salón Cultural de la Biblioteca Municipal Galo Sepúlveda.
La creación de David Benavente y el Teatro Ictus retorna a la agenda artística temuquense de la mano de la Compañía TAT, la misma que hace tres décadas la llevó a las tablas en su propia versión en una temporada que se llevó a cabo a tablero vuelto y que tuvo lugar en la antigua sala TAT ubicada en la calle Claro Solar.
'Me acuerdo que para entonces no había mucho teatro en Temuco así que la gente llegaba a comprar su entrada y se conformaba con anticipar un lugar en las funciones de la semana siguiente, porque de verdad tardábamos pocas horas en copar la capacidad del lugar', comenta la actriz Sandra Méezs.
En 2014, esta comedia con tintes sociales y políticos, regresa de la manos de los actores Luis Figueroa, Carlos Belmar, Sandra Méezs, Osvaldo Salom y Jaime Herrera, del reparto original; más el aporte histriónico Ricardo Pinto y Ricardo Torrijos, quienes completan el grupo de artistas que hacen posible la reposición de este clásico del teatro ochentero.
'Pedro, Juan y Diego' es la historia de tres chilenos que deben enfrentar una nueva realidad y adecuarse a las circunstancias para tener empleo y tener con qué vivir. Cada uno de ellos representa una realidad distinta. Pedro es un maestro calificado en construcción; Juan es un verdulero quebrado y busquilla, y Diego es un administrador público que va de traje y se encuentra con el reto de hacer tareas como mano de obra, explica Ricardo Pinto.
Si bien está llevada a escena en clave de comedia, esta obra, a juicio de Sandra Méezs, guarda mucho de crítica social frente a una política de empleo, cuyos trabajos a veces no tenían sentido.
'En esta obra hay una muda, por ejemplo, que a mi modo de ver representa a toda esa gente que no podía hablar o a aquellos que vieron algo y tuvieron que callar. Está el tipo que se acomoda a lo que sea con tal de parar la olla, está el que va para donde le conviene y el que todo el tiempo se resiste y piensa que debería estar luchando en otra trinchera. También está ese pastor que pronuncia un tremendo sermón que tiene mucho de camuflaje para la época', precisa Méezs.
Hay un hecho anecdótico que explica cómo una obra con este trasfondo pudo pasar la censura de aquellos años y dice relación con que el elenco se puso de acuerdo para mostrar sólo lo cómico al comité censurador y se guardó para después lo profundo de Pedro, Juan y Diego', recuerdan los actores.
La invitación a no perderse este trabajo la hace Ricardo Pinto, quien insiste en recalcar que al final de cuentas 'es una bonita historia contada por buenos contadores de historias'.
1979 El año 1979 fue el estreno nacional de 'Pedro, Juan y Diego' a cargo de la Compañía Ictus bajo la dirección de David Benavente.