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Candidato presidencial brasileño muere en accidente de avioneta

tragedia. Eduardo Campos figuraba tercero en las encuestas. Su eventual reemplazante, Marina Silva, podría complicar la reelección de Dilma Rousseff.

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El candidato a la Presidencia por el Partido Socialista Brasileño (PSB), Eduardo Campos, murió al caer la avioneta en que viajaba en Santos.

El político de 49 años, quien fue gobernador del estado nororiental de Pernambuco, corría tercero en las encuestas previas a las elecciones del 5 de octubre de 2014. Campos fue una de las siete víctimas fatales del accidente.

Campos fue ministro de Ciencia y Tecnología en el Gobierno de Luiz Inacio Lula da Silva (2003-2010), pero rompió con el gobernante Partido de los Trabajadores (PT) para postularse al Gobierno en una fórmula integrada además por la líder ambientalista Marina Silva, candidata a vicepresidente.

Según el comando de campaña del PSB, Marina Silva no estaba en la aeronave siniestrada, en la que viajaban además cuatro asesores de Campos y dos pilotos.

La Aeronáutica brasileña informó en una nota oficial que el avión Cessna que transportaba a Campos de Río de Janeiro a la ciudad de Guarujá, vecina a Sao Paulo, no logró aterrizar en el aeropuerto debido al mal tiempo y por razones desconocidas cayó sobre varios edificios de un barrio residencial de Santos.

El político era nieto del mítico líder izquierdista brasileño Miguel Arraes, fallecido hace precisamente nueve años, el 13 de agosto de 2005.

Graduado en Economía, Campos inició su carrera política en la Universidad Federal de Pernambuco y en 1986 participó activamente en la campaña que eligió a su abuelo gobernador de su estado natal.

Cuatro años más tarde ingresó al PSB y fue elegido diputado estadual. En 1994 fue elegido diputado federal, pero optó por no asumir el mandato y seguir en Pernambuco, como secretario de Hacienda.

Llegó a la Cámara baja en 1999 como el candidato a diputado federal más votado en Pernambuco y se acercó a Lula da Silva, quien lo nombró ministro de Ciencia y Tecnología después de asumir el Gobierno, en 2003.

Abandonó el Gobierno en 2006 para postularse a gobernador de Pernambuco, cargo para el cual fue reelegido cuatro años más tarde.

Rousseff cancela agenda

El anuncio de la muerte de Campos generó una gran conmoción en el mundo político brasileño. La Presidenta Dilma Rousseff, postulante a la reelección, canceló toda su agenda, así como su principal rival en las próximas urnas, el senador Aecio Neves, del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB). El Gobierno decretó tres días de luto.

La tragedia obligará al PSB a buscar un nuevo candidato a la Presidencia en diez días.

Según los analistas, Marina Silva, quien recibió casi 20 millones de votos en los comicios de 2010, se perfila como la más probable candidata.

Una postulación de Silva podría complicar la candidatura de Rousseff, según los expertos, pues se trata de una rival mucho más potente y carismática que Campos.

El fallecido candidato aspiraba a convertirse en el principal representante de una 'nueva política' en Brasil. En su campaña, el ex gobernador buscaba presentarse como un candidato capaz de 'modernizar' la política brasileña.

EE.UU. sopesa enviar tropas a Irak para ayudar a refugiados

Conflicto. Obama está a la espera de recomendaciones.

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El Gobierno de EE.UU. no descarta enviar tropas de infantería para rescatar a los refugiados iraquíes ante el avance de grupos yihadistas en el norte de ese país, según dijo ayer un alto funcionario de la Casa Blanca.

Benjamin J. Rhodes, asesor adjunto de seguridad nacional de EE.UU., señaló que el Presidente Barack Obama podría recibir recomendaciones en los próximos días sobre cómo montar una operación de rescate para ayudar a los refugiados, que se encuentran varados en la cima de una montaña rodeada de militantes sunitas.

'Tiene que haber una solución duradera que lleve a esa población a un lugar seguro en el que puedan recibir una asistencia más permanente', dijo Rhodes. 'Estamos sopesando (abrir) corredores (humanitarios), evacuaciones aéreas y distintas formas de trasladar a la gente que está en un lugar muy peligroso en esa montaña, a una posición más segura', precisó el asesor.

El principal papel de los 130 asesores militares más que EE.UU. envió este martes al norte de Irak será el de 'evaluar cómo sacar a la población de la montaña' e informar a la Casa Blanca sobre opciones viables para el rescate, explicó el funcionario.

El avance de los yihadistas del Estado Islámico (EI) en Irak ha provocado la huida de unas 200 mil personas en el norte del país y se calcula que más de 40 mil, en su mayoría yazidíes kurdos y cristianos, se encuentran todavía atrapados en el monte Sinyar y con necesidad urgente de agua, comida, refugio y medicinas.