Coyuntura económica
Los indicadores económicos recientes revelan una caída significativa del crecimiento, de la inversión, de los ingresos por ventas, incrementos en los costos de combustibles, energía y materias primas importadas a causa del alto precio del dólar, todo ello en un ambiente de incertidumbre generado a raíz de reformas estructurales del sistema tributario y anuncios de reformas laborales, lo que se traduce en efectos directos para la pyme regional, que deberá ajustar sus costos dado los bajos márgenes de utilidad con que estas empresas operan, en un ambiente de alta competencia.
También las familias han comenzado a reducir sus compras de bienes y servicios prescindibles y empiezan a notar las fuertes alzas de precios de bienes de consumos en los supermercados, que menguan su presupuesto y adoptan precauciones ante la incertidumbre de una futura recesión que amenace sus fuentes laborales, que en ocasiones nunca llega.
Lamentablemente las proyecciones crecimiento económico no son auspiciosas para lo que resta de 2014 y que se estima en un 2% y para 2015 en promedio de un 3%, aun cuando los efectos de la creciente desaceleración aún no se conocen en los resultados de las empresa al 31 de diciembre de 2014, cuyo rezago también trascenderá al año 2015.
Frente a este panorama económico, la recomendación para la gente es que busque lugares donde los precios son más convenientes, como las ferias libres para frutas y verduras, y que se abstenga de contraer nuevas deudas para bienes prescindibles.
A los directivos de la pyme regional, que estén atentos observando la evolución de la economía con visión estratégica de largo plazo, trasmitiendo confianza a sus subordinados y al mercado, tomando decisiones oportunas para incrementar sus ventas, optimizar sus costos, evitando reducciones de personal capacitado, ya que éste constituye el mayor capital para la búsqueda de soluciones creativas y viabilizar la empresa.
académico Facultad de Ciencias