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Polarización en torno a la reforma sube de tono y está lejos de aunar criterios

bandos. Lo que para el Gobierno es una 'campaña del terror' para los padres es 'transparencia'.

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El debate en torno al proyecto de ley que busca eliminar el lucro, el copago y la selección en el sistema escolar está más polarizado que nunca y, mientras espera ser tramitado en el Senado, el clima de polarización que existe continúa subiendo de tono.

Fue la propia Presidenta de la República, Michelle Bachelet, quien desde su gira en España encendió la alerta, catalogando las diversas acciones que han realizado los sostenedores, agrupados en la Conacep y los padres en la Confepa como una 'campaña del terror pagada'.

Las reacciones en torno a sus comentarios no tardaron en llegar y a estas alturas ya nadie desconoce que el tema de fondo es ideológico y económico, al tocar el derecho de propiedad de los sostenedores y la garantía del lucro.

Entre el Gobierno y los sostenedores están los padres, cuyos hijos asisten a los colegios particulares subvencionados y quienes de alguna manera ven amenazado el futuro de los proyectos educativos que han elegido.

El senador Alberto Espina (RN), catalogó como 'una estrategia de victimización' las últimas declaraciones de la mandataria.

'La acusación de la Presidenta, respecto de que existiría una campaña del terror pagada contra la reforma educacional, es claramente el intento de llevar adelante una estrategia de victimización, por parte del Gobierno, a fin de ocultar el fracaso de esta reforma, la cual lejos de significar una mejoría en la calidad de la educación, simplemente tiene una finalidad ideológica, que es terminar con la educación particular subvencionada', precisó.

Asimismo añadió que 'nosotros no vamos a caer en el juego de esta estrategia del Gobierno, que lo que busca es lisa y llanamente desviar la atención del tema de fondo', dijo.

El senador José García Ruminot (RN) desacreditó las declaraciones de la Presidenta y sostuvo que 'la verdadera campaña del terror surge desde el propio Gobierno con su proyecto de ley que desde el Senado en estos momentos amenaza la existencia de los colegios particulares subvencionados, particularmente aquellos que cuentan con el reconocimiento de sus comunidades educativas'.

Al respecto, el seremi de Educación, Marcelo Segura, dijo que 'el cuestionamiento a la reforma se ha ido transformando en la defensa del patrimonio de algunos sostenedores y no se han tomado con reflexión y sentido país los cambios que se están proponiendo. A algunos sostenedores sólo les interesa seguir lucrando y no perder el libre albedrío en el uso de los recursos públicos', indicó.

Por su parte, el diputado Mario Venegas (DC), quien es además el presidente de la Comisión de Educación de la Cámara Baja, enfatizó que la 'campaña del terror nadie la puede desconocer, es cuestión de atar cabos. La presidenta de Confepa viaja por el país, se organizan campañas radiales, hay llamados a marchar, existe publicidad en los principales diarios del país, entonces, alguien tiene que financiar esto, ciertamente no son los apoderados', planteó el diputado.

Venegas aclaró que existe un clima muy favorable para que en el Senado se vote favorablemente la indicación del arriendo, 'pero si quieren hacerlo entre personas relacionadas, ahí esto se complica y nos vamos a oponer'.

El presidente del Centro de Padres del Colegio Montessori, Renato Westermeyer, consideró que 'lo que para el Gobierno es una campaña del terror, para nosotros es transparencia y es algo que veníamos pidiéndole hace rato a los sostenedores'.