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Marco Cisterna tiene 45 años, es entrenador de vóleibol internacional y una suerte de rebelde de este deporte. Se graduó como ingeniero civil industrial en 1998 en la Universidad de La Frontera, pero al poco andar lo dejó todo por el deporte que lo apasiona. Estudió educación física en la misma casa de estudios donde inició su carrera como entrenador.
Hoy es coordinador del Centro de Entrenamiento Regional (CER) del Instituto Nacional de Deportes (IND), y además es respaldado por la institución para encabezar un novedoso proyecto formativo con niños de diversos establecimientos educaciones: el ProVolei. Está feliz, ya que la selección sub 12 participará de la liga nacional.
-En la parte final de la vida universitaria yo dejé de jugar por el límite de edad, y sentí una gran ausencia del deporte. Un día se dio una oportunidad en la Ufro de ser ayudante técnico del equipo de hombres y me gustó mucho la experiencia. Paralelo a eso vino un profesor cubano a dar un curso nivel 1 y lo tomé. Al darme cuenta de la visión que ellos tienen, tan profesional del deporte, me gustó mucho. Después se dio la oportunidad y me convocaron a ser el técnico de la universidad, más tarde entré a la selección regional de los Juegos de La Araucanía donde estuve hasta el 2010, y donde mi mejores resultados fueron una final y un tercer lugar. Ya no había vuelta atrás.
-Lamentablemente eso pasa con más del 50% de los chicos. Pero los que tienen mayor proyección también pueden hacerlo. Hay mucha gente que egresa y que sigue entrenando. Pero todo es un tema económico, porque un deportista que es de alto rendimiento necesita facilidades para terminar su carrera. Debiese haber más becas y beneficios para ellos. Actualmente no hay una consideración real en el sistema universitario con los deportistas para que terminen sus carreras y no dejen el deporte. En otros países, por ejemplo, se utilizan tutores para los deportistas.
-El vóleibol en la Región se sustenta en el ámbito escolar y universitario. Pero nunca el objetivo va a ser el deporte sino que en ambos casos son los estudios. Ahora el IND regional nos pidió elaborar un plan de desarrollo para los deportes estratégicos del CER y de los Juegos de La Araucanía. Y en este marco surge el ProVolei, que está sustentando en el Club de Estudiantes de La Araucanía, que pretende ser una columna paralela al circuito de escuelas y universidades. Por ejemplo, ahora en verano, que es la mejor época del año para hacer deporte, los niños que practican vóleibol están de vacaciones. Nosotros estamos trabajando.
-La mayoría de las escuelas municipales no tienen profesor de vóleibol, aquí apuntamos nosotros. Buscamos niños de colegios donde no hay vóleibol. Lo importante es formar un equipo regional.