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Después de 25 días de extenso combate, una larga lista de asignación de recursos y una serie de controversias, el incendio en China Muerta se dio ayer por controlado, según la Conaf, institución a cargo de proteger las áreas verdes del país.
Desde la propia Conaf informaron que "el incendio que se encuentra confinado sin avance y sin riesgos de propagación, con trabajos de liquidación en puntos calientes".
Ello, gracias a la formación de cortafuegos que frenaron el avance del fuego y lo redujeron a un perímetro de 70 kilómetros. "En ese perímetro se hacen obras con maquinaria, personal, lanzamiento y aplicación de químicos, y anclajes hacia áreas seguras como incombustibles, altas cumbres, roqueríos o caminos que puedan haber en el área. Todo ese conjunto de obras constituye la línea de control", especificó el director regional de Conaf, Alfredo Mascareño.
Para ello trabajan 61 brigadistas, 14 funcionarios técnicos, una cuadrilla de guardaparques y dos helicópteros de Conaf. Además, dos retroexcavadoras, tres bulldozer y una excavadora acompañan al equipo humano. Los recursos se destinan principalmente en los sectores norte, este y sureste del incendio.
Labores y críticas
En Cunco y Melipeuco, el intenso olor a humo se tornó mucho más tenue que hace dos semanas. El viento y la débil lluvia que cae entregan un nuevo aire a las localidades.
En el sector Cabeza de Indio, con sus paisajes devastados por el paso de las llamas, cientos de ramas aparecen quebradas y caídas, pero a los costados de senderos hechizos: se trata de cortafuegos, elementos que ayudaron a controlar el siniestro y alejar las llamas de hectáreas de bosque nativo.
Pero hay habitantes de la zona que critican las labores de Conaf y, como en tantas otras oportunidades, falta de gestión. Fernando Barros, empresario turístico y residente de las cercanías del sector Truful Truful, asegura que hay líneas fabricadas por privados, a falta de brigadistas.
"Lo que no me explico es que a las 5 de la tarde bajaban todos los brigadistas y el fuego quedaba durante 18 horas solo, porque no se hicieron dobles turnos, porque no subieron e hicieron campamentos arriba, y eso fue mal manejado", critica.
Sus palabras fueron apoyadas por Jaime Silva, ingeniero forestal, quien acompañaba al empresario para evaluar, de forma particular, el alcance del fuego. "El incendio estuvo a punto de bajar por este lado de Melipeuco", indica el profesional desde un acceso a Cabeza de Indio que se aleja a menos de un kilómetro del camino hacia Icalma. Silva desacreditó el trabajo de Conaf y atribuyó la creciente derrota del fuego a la lluvia que caía ayer. "Hoy, yo diría que este incendio lo apagó Dios", asegura.
Los brigadistas ahora comenzaron a avanzar hacia el interior del perímetro, identificando fuego tanto en la parte superior de las especies arbóreas como en la parte inferior, un combate que denominan de tipo subterráneo, en el que ramas y troncos tapados por una capa de tierra y hojas continúan ardiendo. Por ello, el hecho que el incendio esté en control no significa que decrezca el número de brigadistas en combate.
"Seguimos trabajando en la etapa siguiente que es de la liquidación del incendio", aseguró el director de Conaf, Alfredo Mascareño.
Además, está el apoyo de un helicóptero, al cual -como todos los medios aéreos- necesitan una mantención especial. En este caso, este vehículo es mantenido cada 100 kilómetros de avance.
En las comunidades cercanas al siniestro, como Juan Meli y Melivilu, se respira la tranquilidad. Aquellos que habían evacuado sus hogares por temor al avance del fuego, ayer comenzaron a retornar a medida que el temor se va alejando. "Sí, la gente ha vuelto a sus casas. Todos estamos volviendo un poco a la normalidad, entre comillas, pero siempre está ese miedo del resguardo que tiene que haber en el sector", dijo la dirigente Luz María Huenupi, de la comunidad Juan Meli.
Sobre el anuncio de control del fuego, Huenupi asegura que "sabemos que el fuego ya no está ardiendo arriba, pero está ardiendo abajo (valle)... Ahora, nosotros esperamos que llueva mucho para poder tener humedad", expresó.
Incendio en Niblinto
Pero así como la preocupación por el descontrol del fuego se reduce en China Muerta y Conguillío, el mismo temor se mantiene en el sector Niblinto (Reserva Nacional Malleco y Parque Nacional Tolhuaca), donde ya se han consumido 4.595 hectáreas de un siniestro que continúa en descontrol.
Al avión cisterna y dos helicópteros pertenecientes a Conaf, se agregan otros dos helicópteros y cuatro aviones cisterna de la Onemi, estos últimos destinados para depositar los 16 mil litros de retardante químico conseguidos en Estados Unidos. Las condiciones meteorológicas impidieron ayer el vuelo de aeronaves.
