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40 años | 17 de mayo de 1975

El 27 termina obra gruesa de la piscina municipal

El día 27 del presente mes se pondrá término a la obra gruesa de la piscina municipal de Temuco. Debido a las condiciones climáticas que resultaron desfavorables, los trabajos se retrasaron, pero de todas maneras se encuentra dentro de los plazos que estarían previstos cuando comenzó la construcción.

10 años | 17 de mayo de 2005

Abogados de fiscal Esmirna Vidal van a la Suprema

Ante el pleno de la Corte Suprema parten mañana los alegatos relacionados con la petición de remoción que el fiscal nacional Guillermo Piedrabuena presentó contra la fiscal de la Novena Región, Esmirna Vidal, tras la realización de un sumario instruido en el marco del caso Lavandero.

1 año | 17 de mayo de 2014

Gobierno sufre bochorno al presentar polígonos

Durante la mañana la Seremi de Salud entregó los nuevos lineamientos de la alerta sanitaria, pero durante la tarde el Gobierno Regional lo desautorizó. La falta de la venia de Francisco Huenchumilla y su molestia por la divulgación de los perímetros derivó en una agitada jornada que culminó con la "rectificación".

El desprecio por la vida

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El deseo de una vida plena forma parte de un anhelo indeleble de fraternidad, que nos invita a la comunión con los otros, en los que encontramos no enemigos o contrincantes, sino hermanos a los que acoger y querer. Siendo el hombre un ser relacional, destinado a realizarse en un contexto de relaciones interpersonales inspiradas por la justicia y la caridad, es esencial que para su desarrollo se reconozca y respete su dignidad, libertad y autonomía. Por desgracia, el flagelo cada vez más generalizado de la explotación del hombre por parte del hombre, el desprecio por la vida humana desde su concepción hasta su muerte natural, y la indiferencia ante el dolor ajeno, daña severamente la vida de comunión y pisotea sus derechos fundamentales.

Adán y Eva, cumpliendo la bendición de Dios de ser fecundos y multiplicarse, concibieron la primera fraternidad, la de Caín y Abel, con el mismo origen, naturaleza y dignidad creados a imagen y semejanza de Dios. Por desgracia, la realidad negativa del pecado muchas veces interrumpe la fraternidad creatural y deforma continuamente la belleza y nobleza del ser hermanos y hermanas de la misma familia humana. Caín, además de no soportar a su hermano Abel, lo mata por envidia, cometiendo el primer fratricidio. Su historia (cf. Gn 4,1-16) pone en evidencia la dificultad de la tarea de vivir unidos, preocupándose los unos de los otros.

En la historia de los orígenes de la familia humana, el pecado de la separación de Dios, de la figura del padre y del hermano, se convierte en una expresión del rechazo de la comunión, con las consecuencias que ello conlleva y que se perpetúan de generación en generación: rechazo del otro, maltrato de las personas, violación de la dignidad y los derechos fundamentales, la institucionalización de la desigualdad, la violencia indiscriminada sobre inocentes. De ahí la necesidad de convertirse continuamente a la vida nueva, y al nuevo modo de vivir en el amor que Cristo nos mereció por su Muerte y Resurrección.

Por ello la mirada ante la cruel muerte de dos universitarios debe centrarse ante todo en el tipo de sociedad que estamos construyendo, en los valores en que educamos a nuestros niños y jóvenes, en el lugar que ocupan los demás en la propia vida, en el ponerse en el lugar del otro, en una auténtica ética que impulse a luchar en contra de todo lo que pueda dañar a las personas o destruir sus vidas y dignidad, a que jamás se alcanza la felicidad ni la paz o la justicia, sobre el sufrimiento del prójimo.

Rezo de modo especial para que, respondiendo a nuestra común vocación de colaborar con Dios y con todos los hombres de buena voluntad en la promoción de la concordia y la paz en el mundo, resistamos a la tentación de comportarnos de un modo indigno de nuestra humanidad.

Héctor Vargas,

Nuevo gabinete y La Araucanía

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Aunque los nuevos ministros nombrados por la Presidenta Michelle Bachelet tienen ya amplias tareas gubernamentales en sus respectivas áreas, fundamentalmente con la responsabilidad de, esta vez, procurar un mayor diálogo entre los actores políticos y de restablecer las confianzas de una ciudadanía cada vez más recelosa, tienen que enfrentar, además, el descuidado trato que el Poder Ejecutivo le ha prodigado a La Araucanía, que a pesar de los permanentes anuncios, se mantiene aún en una especie de patio trasero del país. El anterior ministro del Interior, Rodrigo Peñailillo, realizó numerosos anuncios en bien de la paz social de la Región durante la interpelación de la que fue objeto el año pasado, pero de ahí en más, prácticamente no hubo señales desde el nivel central en cuanto a ejecutar acciones concretas para disminuir la violencia en las zonas rurales, y que en los últimos días se ha extremado con el ataque a personas inocentes.

Desde la Región, el intendente Francisco Huenchumilla ha establecido un discurso que apunta a apurar el tranco del Estado para realizar las reparaciones que demanda el pueblo mapuche, junto con advertir que el principal órgano existente para estos fines, la Corporación Nacional de Desarrollo Indígena (Conadi), se encuentra en una inobjetable crisis de la cual no ha podido salir. Pero en el actual sistema político, la voluntad de un intendente no basta para generar las políticas públicas que demanda un problema de la magnitud del que enfrenta La Araucanía.

Por ello es que los nuevos titulares de las carteras de Interior, Secretaría General de la Presidencia (Segpres) y Desarrollo Social tienen en sus manos la responsabilidad casi histórica de enfrentar la inseguridad que hay en los sectores rurales de la Región y las demandas de tierras y de participación política de las comunidades mapuches. Postergar el problema para más adelante, que parece ser la tónica de cada administración en esta materia, por ningún motivo puede seguir siendo la opción.

Si Interior asume la obligación de dar más seguridad, la Segpres avanza en el diseño institucional para articular la representación, y Desarrollo Social soluciona de una vez por todas la crisis en que está sumida la Conadi, la Región podría efectivamente comenzar a mejorar. Pero si, como se estila, se espera que la solución surja por generación espontánea, La Araucanía seguirá igual, e incluso peor.