Zorba es un hombre sin ataduras, un gozador, un aventurero lleno de energía, tanto que en la interpretación de Rodrigo Guzmán, primer bailarín estrella del Ballet de Santiago, ésta desbordó, y como ocurre cada vez que la obra se presenta sobre un escenario, contagió a un público que anoche repletó la plaza de las artes de La Araucanía.
Más de mil personas disfrutaron de una puesta en escena pocas veces vista en la Región. Así, "Zorba, el griego" cumplió con lo prometido, convirtiendo al Teatro Municipal de Temuco en una verdadera fiesta, en donde el público respondió al elenco dirigido por la maestra Marcia Haydée con ovaciones y aplausos.
Por lo que, desde el momento en que aparece en escena John, personaje interpretado por el primer bailarín del elenco, Lucas Alarcón, la atención se volcó exclusivamente al escenario, en donde el turista se enamora de Marina, una joven griega caracterizada por la solista Montserrat López, desatando la irá del pueblo.
Así, la molestia de los habitantes se acrecentaba a medida que transcurría el montaje, hasta que aparece en escena el carismático Zorba, quien de inmediato se enfrenta a éstos ofreciéndole su amistad a John, a través del verdadero significado de la danza: "un sinónimo de liberación y euforia dionisíaca".
En ese camino se encontraba John cuando Manolios, antagonista personificado por el solista Agustín Cañulef, y quien siempre ha estado enamorado de Marina, lo hostiga demostrándole que definitivamente su presencia molesta.
Por lo mismo, Zorba, viendo el sufrimiento de su amigo, lo invita a distraerse, momento en el que Madame Hortense (Michelle Bittencourt) se enamora del provocador personaje, siendo correspondida por "El griego", pero aceptando la libertad del protagonista, quien fue interpretado por Anthony Quinn en una película ganadora de tres premios Óscar, basada en la novela de Nikos Kazantzakis.
TRAGEDIA
La obra se tornó en una tragedia cuando Marina fue sofocada por una multitud enajenada, aumentando el dramatismo con la repentina muerte de Madame Hortense, hecho que devastó a Zorba, quien gracias a los consejos de su amigo y pupilo John, se refugió en la música.
De esta manera, la obra transformada en ballet por Lorca Massine, y estrenada en la Arena de Verona en 1988, emocionó a los presentes con la recordada música de Mikis Theodorakis, culminando cuando el irreverente Zorba y el extranjero John, en un acto de resiliencia, invitan a los habitantes del pueblo a unirse a una gran pantomima, dejando de lado la tragedia a través del baile, recibiendo el cariño del público.
"Zorba, el griego" llegó a la capital de La Araucanía gracias a una alianza entre el Teatro Municipal de Santiago y el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes, a través del programa "Cultura en viaje", el cual permite que cada año el Municipal arribe a regiones con sus elencos y montajes más importantes. La iniciativa es apoyada por el Teatro Municipal de Temuco y la Universidad de La Frontera, en donde se presentarán mañana, a partir de las 20 horas.